La víctima de 23 años fue salvajemente golpeado tras caer al suelo como consecuencia de un puñetazo en la cara.
Los hechos ocurrieron en Burjassot (Valencia), a finales de junio. Se recibió una llamada a la Sala del 091, donde se comunicaba que una persona estaba sangrando tras sufrir una agresión.
Los agentes al llegar al lugar, se encontraron con un joven de 23 años, sentado en un banco, sangrando abundantemente por la boca y nariz. Estaba aturdido como consecuencia de la agresión.
Gracias a los testigos de los hechos, se pudo determinar, que el joven pasó al lado de un grupo de 10-12 jóvenes, cuando uno de ellos se volvió hacia la víctima.
Sin mediar palabra le propinó un puñetazo en la boca que le hizo caer al suelo.
Cuando se encontraba en el suelo, el agresor siguió golpeándole.
Le propinó patadas en la cabeza hasta que perdió el conocimiento.
Acto seguido huyó del lugar hacia su grupo de amigos.
Una ambulancia se personó en el lugar y tras una valoración, lo trasladaron a un hospital de Valencia.
La víctima presentaba un traumatismo craneofacial, fractura de huesos nasales y conmoción pos-traumática.
El autor es un joven uruguayo con antecedentes.
Los policías identificaron al sospechoso, el cual tras comparecer en dependencias policiales fue detenido como presunto autor de un delito de lesiones.
El autor es un joven uruguayo de 28 años, con antecedentes policiales, el cual tras ser oído en declaración fue puesto en libertad.
El delito de lesiones viene tipificado en el Código Penal, en el artículo 148.
“El que, por cualquier medio o procedimiento, causare a otro una lesión que menoscabe su integridad corporal o su salud física o mental, será castigado, como reo del delito de lesiones con la pena de prisión”. Esta pena de prisión es de tres meses a tres años o también puede ser una multa de seis a doce meses, siempre que la lesión necesite tratamiento médico o quirúrgico tras la primera asistencia médica”
Las penas pueden agravarse de 2 a 5 años de prisión, si hubiese habido ensañamiento o alevosía.