La Fiscalía de la Audiencia Nacional ha solicitado 19 años de cárcel para el vigilante de seguridad detenido en 2018 en Terrassa que amenazó con atentar contra el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.
El considerado “experto en tiro y francotirador” se sentará en el banquillo de los acusados por manifestar presuntamente en un grupo de WhatsApp su intención de acabar con el político socialista español.
Según afirman varios medios, ha llegado a difundir textos tales como: “Me gustaría tenerlo un día en el punto de mira” o “rojo de mierda”. De esta forma se trató de esclarecer su identidad y proceder a su detención dadas las presuntas alusiones explícitas para ajusticiar al actual presidente de España.
En el registro de su domicilio se llegaron a intervenir un auténtico arsenal con hasta 16 armas cortas y seis largas, rifles de precisión, un fusil de asalto y un subfusil ametrallador checoslovaco.
Según la acusación, M.M.S. disponía de conocimientos y medios necesarios para acabar con él. Sin embargo le faltaba apoyo logístico. Ahora se sentará en el banquillo de los acusados enfrentándose a diversos cargos por homicidio en grado de proposición con la agravante de discriminación ideológica, y por un delito de depósito de armas y municiones de guerra, tenencia de armas prohibidas, depósito de municiones no autorizadas y tenencia de explosivos.