Agentes de la Policía Nacional y Guardia Civil han neutralizado a un agente suspendido de empleo en una gasolinera de un pueblo de Burgos. El policía acabó falleciendo tras los impactos de bala recibidos en el transcurso de un tiroteto donde también se vieron involucrados agentes de la Guardia Civil. Había sustraído una pistola de la comisaría de Lonzas (A Coruña) y se había dado a la fuga.
El agente se encontraba inmerso en una investigación de Asuntos Internos por un caso de narcotráfico. Así lo aseguran varios medios citando fuentes de la investigación. Entre ellos, el periódico La Voz de Galicia afirma que estaba suspendido de empleo al estar implicado en una operación con cocaína rosa.
También se precisa que desde el pasado 18 de abril había pasado a segunda actividad por insuficiencia de aptitudes psicofísicas y tenía el arma retirada. Sin embargo, en la tarde de ayer el agente pudo acceder hasta la zona de vestuarios de la comisaría y lograr sustraer la pistola reglamentaria del interior de la taquilla de un compañero.
Desde ese momento efectivos de la Policía Nacional iniciaron una persecución para darle el alto que finalizó trágicamente a la entrada de la localidad de Villagonzalo Pedernales, donde también intervinieron efectivos de la Guardia Civil.
En estos momentos se abren varias vías de investigación para esclarecer los hechos y entre ellas otros planteamientos de cara al futuro para evitar estos casos. Por ejemplo, ¿Quién estaba realizando un seguimiento psicologico de este agente? ¿Cómo se le permitió la entrada a comisaría libremente y sin tutorizar? ¿Cómo pudo robar el arma?