El terrorista Manuel Miner fue salvado por la Guardia Civil cuando se encontró en medio de un tiroteo en su casa con tan sólo 8 años.
Todo sucedió la madrugada del 15 de junio de 1984, sobre las tres y media, en el domicilio de la familia Miner Villanueva.
En esa casa se encontraban tres niños, Manuel Miner, de ocho años, su hermano mayor y su hermana más pequeña.
En otra habitación dormían sus padres, Pedro y Fermina y en una tercera habitación se encontraban tres sanguinarios terroristas del comando Donosti.
La casa de los Miner Villanueva se usaba frecuentemente por los tres integrantes del comando Donosti antes de realizar alguna acción o justo después de haberla realizado.
Esa noche agentes del grupo de Información y del GAR (Grupo Antiterrorista Rural) tenían rodeada la casa
Al grito de “Guardia Civil”, los agentes de Información echaron la puerta abajo ante la falta de respuesta.
Al entrar se encontraron con el matrimonio y el hijo mayor, los cuales se habían despertado y levantado.
Tres habitaciones.
En el pasillo había tres habitaciones, la primera con la luz encendida y abierta, las dos siguientes cerradas.
Cuando los guardias comenzaron a avanzar por el pasillo, empezó una ráfaga de disparos desde la última habitación.
El primer agente recibió varios impactos de bala en brazos y piernas. Por suerte el chaleco salvó su vida, si bien quedó gravemente herido en el suelo.
Los demás agentes se pegaron a la pared de las puertas donde no alcanzaban las balas, debido al ángulo de los disparos.
La situación se volvió tensa. Tenían un compañero herido en el suelo al que no podían acercarse, en una habitación terroristas armados y abriendo fuego indiscriminadamente y entre medias una habitación cerrada ignorando que podría haber dentro.
El GAR se hizo cargo de la situación y entró al domicilio.
Fermina comenzó a gritar que sus hijos pequeños seguían en la casa. Estaban detrás de la puerta cerrada, entre los guardias y los terroristas que no cesaban de disparar.
En un momento dado, la habitación se abrió y dos niños aparecieron en mitad del pasillo, Manuel Miner de 8 años y su hermana menor.
Los agentes, arriesgando sus vidas se metieron en medio de los tiros y entraron en la habitación de los niños, consiguiendo sacarlos con vida.
El agente herido también logró salvarse descolgándose por una ventana del salón.
Finalmente, dos terroristas fueron abatidos por un tirador desde un edificio de enfrente. El líder, Zabarte había estado escondido en el dormitorio del matrimonio y fue detenido.
Ese niño de 8 años que fue salvado por la Guardia Civil ya sea por la influencia del entorno en el que se crio, o por otros motivos, pasó a ser parte del comando Madrid de la banda terrorista ETA.
En el 2006 Manuel fue condenado a 253 años de prisión por colocar una bomba frente al Santiago Bernabéu, pocas horas antes del encuentro entre el Real Madrid y el F.C.Barcelona.
¿El “Zabarte” que mencionan es El Carnicero de Mondragón, Jesús Zabarte Arregui?
Seguro, si estaba escondido sin dar la cara, segurísimo que era él; el muy macho que no se arrepiente porque no tiene motivo para hacerlo, según su particular filosofía.
Mal compañero (mejor para los funcionarios de prisiones) que no se hablaba ni relacionaba con los otros criminales etarras en su etapa de la prisión de Los Rosales en Ceuta.