El pasado viernes, en la presentación de dos nuevas embarcaciones para los Mossos en el puerto de Barcelona con la presencia del presidente de la Generalitat, Pere Aragonés, el Gobierno autonómico catalán anunciaba su intención de que este servicio sea “una policía integral en el ámbito marítimo” y asegurara que en la actualidad sus funciones son de “seguridad ciudadana en el mar, vigilancia de la navegación, vigilancia de eventos, orden público y vigilancia de infraestructuras portuarias e instalaciones náuticas. También actúa como policía judicial y policía administrativa…”.
“Se trata claramente de competencias que le son impropias, ya que la costa catalana, como parte de la costa de España, tiene bien claras cuáles son las competencias que le corresponden a cada cuerpo policial”, aclara Milagros Cívico de la asociación de la Guarda Civil, JUCIL. “El abandono mostrado por el actual Ejecutivo de España sobre esta polémica y la permisión callada para que se usurpen de una forma escandalosa competencias que no les concede la ley genera además problemas de seguridad, y graves, para los ciudadanos”, afirma la representante de los agentes de la Benemérita.
La secretaria de JUCIL en Cataluña, Milagros Cívico remarca la constante exclusión por parte de las autoridades y responsables de los servicios de urgencia de Cataluña de la Guardia Civil. “Una actitud que, en aras a un simple juego político de poderes, pone en peligro la vida de las personas. Confiamos en que nuestras demandas sean mejor atendidas por los próximos ocupantes del Gobierno y por quien sea su titular en el Ministerio del Interior”.