La primicia aparece en el medio Metropoli, según este diario , la tragedia se evitó en los juzgados de Granollers. Dos vigilantes de seguridad privada que trabajaban este viernes, 21 de junio, en las instalaciones impidieron que un hombre que llevaba una botella con gasolina escondida en la mochila accediera y se quemase a lo bonzo.
El hombre se echó por encima el contenido de la botella cuando las dos compañeras de seguridad no dejaron que se saltara el control. De ahí, sacó un mechero que pretendía encender para salir ardiendo, todo ello ante la presencia de un juez.
Eran las 11 horas del citado día y los vigilantes se echaron encima del suicida para evitar lo peor. Las compañeras de seguridad privada avisaron a los Mossos d’Esquadra, que acudieron en pocos segundos porque ya se encontraban en el edificio, en la zona de los calabozos. Los agentes procedieron a poner al hombre contra la pared y arrebatarle el mechero que sostenía en las manos. Mientras la policía intervenía, ambas vigilantes se hicieron con unos extintores por si acaso el hombre llegaba a cumplir su cometido.