Una bebé se salva de morir ahogada en plena calle de Madrid gracias a la rápida actuación de dos policías nacionales.
Los padres detectaron en plena calle que su hija se estaba ahogando por un atragantamiento y pidieron de manera desesperada auxilio.
Una pareja de policías que se encontraban cerca acudieron de inmediato, Delfín y Alejandro, así se llaman los héroes, los cuales vieron que la niña ya presentaba síntomas de rigidez y su piel estaba adquiriendo una tonalidad azulada. Rápidamente y tras indicaciones del 112 le realizaron la maniobra de Heimlich, y la bebé, según explican los propios agentes, “echó lo que le estaba obstruyendo las vías respiratorias, una especie de pasta, como de leche y pudo respirar”.
Delfín y Alejandro son unos auténticos héroes
Con la preocupación de una intervención donde la víctima es un niño, “ya que si fallas te queda grabado para toda la vida”, Delfín y Alejandro respiran con alivio desde el conocimiento de que han hecho las cosas bien y que un colectivo policial se siente muy orgulloso de su intervención.