Ha llegado el momento de la verdad para el tercer tramo de lo que se ha venido denominando equiparación salarial. Es el momento en el que hay que determinar la cantidad que corresponde a los guardias civiles y lo que les corresponde a los policías nacionales.
Desde la Asociación Pro Guardia Civil (APROGC) lo tienen claro. A los guardias civiles les corresponde la cantidad necesaria para alcanzar los 476’7 millones de euros que es la cantidad que desde un principio se determinó necesaria para supuestamente alcanzar la equiparación.
La responsabilidad de la decisión corresponde a los dirigentes del Ministerio del Interior. El Secretario de Estado de Seguridad dejó bien claro que asumiría esa responsabilidad si no había acuerdo entre asociaciones profesionales de guardias civiles y sindicatos policiales, como era previsible.
Tanto el Ministro del Interior, como el Secretario de Estado de Seguridad, la anterior y el actual, han repetido que asumían el acuerdo de equiparación. Asumir el acuerdo supone asumir las cantidades que sobre el papel se establecieron.
El Secretario de Estado de Seguridad, en estas últimas reuniones, reivindicó el rigor y la verdad de los datos objetivos. RIGOR Y VERDAD.
“Si ahora se modifican las cantidades iniciales, si los guardias civiles no llegamos a los 476’7 mill€, tendrán que explicarnos muy claramente el por qué, en qué datos objetivos se han basado para determinar esa modificación”, precisan desde APROGC.
La asociación de guardias civiles reivindican también que pueden ser tratados de otra manera alegando que “no puede ser que para unos la equiparación esté más cerca que para otros”.
“Si no llegamos hasta donde nos dijeron desde el principio, en APROGC consideraremos que los guardias civiles nos podremos sentir defraudados y engañados”, sentencian.
Yo creo que primero en la GC deberían resolver su problema personal. La brecha que ellos tienen entre un guardia civil y un coronel es mucho mayor que la que hay entre un policía y un comisario. Redistribuyendo su propia asignación ya harían mucho