En la primera fase de esta operación, 38 personas fueron detenidas por manipular y vender los tacógrafos. Ahora, la Guardia Civil ha detenido a los empresarios y transportistas que estaban utilizando estos aparatos falseados
Las detenciones han tenido lugar en las provincias de Murcia, Alicante, Valencia, Cantabria, Ciudad Real, Huelva, Córdoba y Alicante
La Guardia Civil ha detenido a un total de 26 empresarios y conductores que estaban utilizando tacógrafos digitales manipulados. Las detenciones se han llevado a cabo en varias provincias españolas: Murcia, Alicante, Valencia, Cantabria, Ciudad Real, Huelva, Córdoba y Alicante.
Se trata de la segunda fase de la operación Pantaco, con la que la Guardia Civil ya desarticuló el año pasado una organización dedicada a la manipulación y venta de tacógrafos manipulados.
Después de analizar la documentación incautada a los 38 detenidos anteriormente, guardias civiles de Tráfico han logrado identificar a los profesionales del sector que estaban utilizando estos aparatos falseados, un total de 26 transportistas y empresarios.
La utilización, instalación y uso de este tipo de aparatos tacógrafos manipulados, se castiga como un delito de falsificación en documento oficial, además de la posibilidad de investigación de la empresa que los tiene instalados en sus vehículos, pudiendo ser investigados por un posible delito contra los derechos de los trabajadores.
Este tipo de aparatos se encuentran instalados en toda clase de vehículos que tienen un peso superior a 3,5 toneladas o que puedan transportar a 9 personas o más. El grupo desmantelado manipulaba el tacógrafo digital mediante la modificación del software, ofreciendo al transportista la posibilidad de conducir sin que le cuenten las horas de conducción, ni los kilómetros recorridos.
Gracias a este tipo de fraude, cuando los agentes realizan una inspección, se obtiene como resultado un documento que induce a error sobre su autenticidad, al reflejar unos datos de registro absolutamente falsos y distintos de los reales. Este resultado falseado contiene información referente a los tiempos de conducción, descanso, disponibilidad, otros trabajos, velocidad y distancia recorrida, con el consiguiente peligro para la seguridad vial, además de la competencia desleal para el resto del sector.
Las investigaciones continúan abiertas por el Juzgado de Instrucción que conoce de la causa, no descartando detenciones posteriores.