Agentes de la Policía Nacional han detenido el viernes por la mañana en un parque de Valencia a un hombre de 22 años, de origen marroquí, con antecedentes policiales, como presunto autor de un delito de amenazas, tras al parecer amenazar con quemar a los trabajadores de un centro de ayuda a inmigrantes de Valencia.
El viernes por la mañana cuando los agentes que realizaban labores de prevención fueron alertados por la Sala del 091 para que se dirigiesen a un centro de ayuda a inmigrantes de Valencia, donde al parecer había un hombre que estaba agresivo con los trabajadores sociales del mismo.
Inmediatamente, los policías se dirigieron al lugar donde averiguaron que esta persona se había marchado y que los trabajadores del centro llevaban un tiempo teniendo problemas con ella.
Dos días antes de su detención ya se había presentado en el
centro, amenazando a los trabajadores
Los agentes de la Policía Nacional averiguaron que hacía dos días el sospechoso había accedido al centro por un despiste de los trabajadores y una vez dentro al parecer había comenzado a interferir en la atención de los usuarios, por lo que le recriminaron su actitud y le invitaron a que se marchase.
En ese momento, comenzó a ponerse violento al mismo tiempo que gritaba que iba a quemar todo eso, que los iba a enterrar a todos y que no sabían quién era, esgrimiendo un espray de defensa. Uno de los trabajadores consiguió cogerlo y sacarlo del centro, mientras que al parecer arremetía contra el mobiliario.
Había averiguado el domicilio de una de las trabajadoras y la acosaba
Los agentes también pudieron averiguar que una de las trabajadoras al parecer era acosada por el sospechoso y que incluso había averiguado su domicilio, y ésta lo había observado debajo de su casa en actitud vigilante.
Debido al miedo que tenían los trabajadores, les había llevado a cambiar las rutinas de trabajo.
Los policías mientras daban una batida por la zona en un parque observaron a un hombre que coincidía con las características físicas aportadas, por lo que tras identificarlo y averiguar que vivía en Alzira -Valencia- pero que se desplazaba casi a diario hasta ese punto de Valencia para ver a unos trabajadores de un centro de ayuda con los que al parecer tenía unas cosas pendientes, y tras realizar diversas comprobaciones, lo detuvieron como presunto autor de un delito de amenazas.