Los Mossos d’Esquadra detienen a un hombre en Barcelona que intentaba vender a una mujer para ser explotada sexualmente
El detenido utilizó un nombre falso al conocer a la víctima en un restaurante en Francia e insistió en saber si entendía o no al árabe.
Gracias a la reacción de la mujer al pedir ayuda y a la colaboración ciudadana al dar el aviso a los servicios de emergencias, los agentes pudieron detener al autor de los hechos.
Agentes de los Mossos d’Esquadra del Grupo de Delincuencia Urbana de Ciutat Vella detuvieron el 20 de noviembre a un hombre de 38 años que había intentado captar a una mujer en Francia y que la engañó e intentó vender con finalidad de explotación sexual a cambio de dinero.
La víctima detectó una actitud sospechosa por parte del detenido e hizo ver que no hablaba ni entendía al árabe y que sólo hablaba francés. Él le había pedido en reiteradas ocasiones si la entendía cuando le hablaba en árabe y una vez tuvo claro que ella no hablaba este idioma hizo una llamada telefónica a una persona desconocida en árabe, y la víctima pudo saber cuál era el objetivo real del autor y entonces pudo pedir ayuda.
El investigado y la víctima se habían conocido en un restaurante de Francia en el mes de agosto. El hombre utilizó un nombre falso para presentarse e iniciaron una relación de amistad. Decidieron volver a verse el 20 de noviembre, pero el detenido insistió mucho en que quería quedar con la víctima en Barcelona, lo que llamó la atención de la mujer ya que ambos residían en Francia.
Finalmente la víctima accedió a verlo y quedaron el mediodía del día 20 de noviembre en Marsella para después viajar juntos hasta Barcelona. Una vez en la ciudad condal cenaron en un restaurante y durante la conversación el hombre le preguntó varias veces a la víctima si además de francés también hablaba o entendía el árabe. Como a la mujer le resultó muy extraña esta insistencia hizo ver que sólo hablaba en francés.
Acabado la cena y una vez en el coche el hombre inició una llamada telefónica en árabe con una tercera persona. La víctima pudo escuchar cómo el investigado pretendía acordar su venta a cambio de una cantidad de dinero y que lo engañaría para conseguirlo. Durante la conversación hablaba de los rasgos físicos de la mujer como óptimos para una explotación sexual. Ella espantada por el contenido del diálogo en un momento en que el hombre detuvo el vehículo aprovechó para salir corriendo y pidió ayuda a los trabajadores de un hotel cercano.
El personal del hotel alertó en seguida al 112 y una patrulla de paisano de Mossos d’Esquadra de que estaba por la zona detuvieron al hombre. El arrestado quería hacer creer a los agentes que la mujer era su pareja sentimental. En el allanamiento del vehículo intervinieron dos teléfonos móviles.
Mientras tanto el recepcionista del hotel recibió una llamada de la supuesta hermana de la mujer donde decía que la vendría a buscar en poco rato, pero la mujer confirmó que no tenía ninguna hermana.
Gracias a la reacción y valentía de la mujer al pedir ayuda y a la colaboración ciudadana al dar el aviso a los servicios de emergencia, los agentes pudieron detener al autor de los hechos y se pudo auxiliar y liberar a una mujer que podía haber sido explotada sexualmente.