También se le imputa un delito de usurpación de identidad ya que utilizaba documentación falsa para alojarse en viviendas de alquiler.
En el registro que se practicó se intervinieron varios dispositivos móviles, que han permitido obtener más información sobre la forma de operar del detenido, entre otras aplicaciones, 20 wallets que utilizaba para canjear las criptomonedas.
Agentes de la Policía Nacional han detenido en una localidad de Valencia a un hombre de 20 años, como presunto autor de varios delitos de estafa (Smishing) y usurpación de identidad.
El Grupo de Ciberdelincuencia de la Policía Nacional en Valencia inició las investigaciones el pasado mes de noviembre, al tener conocimiento a través de la denuncia de una entidad bancaria, de que muchos de sus clientes, habían recibido un SMS con la excusa de un problema en su cuenta bancaria y que tras pinchar en un enlace, se hicieron con sus credenciales para operar “on line” con sus tarjetas.
Las investigaciones de los agentes permitieron determinar que la persona que realizaba esta estafa, estaba adquiriendo tarjetas recargables de criptomonedas que luego podía convertir en efectivo.
Al parecer tras escoger los cupones de criptomonedas que más tarde pretendía adquirir, se dirigía a caja donde abonaba a los mismos con numeraciones de tarjetas de crédito de terceras personas, obtenidas mediante la mecánica de Smishing.
Una vez realizada la compra fraudulenta de los cupones, procedía a introducir los códigos que los propios cupones llevaban incorporados, en la plataforma de la empresa, produciéndose así la adquisición de las criptomonedas, que más tarde y en cualquier otro lugar, se canjeaban por dinero en efectivo o se mandaban las propias criptomonedas a otros monederos virtuales donde los recibían terceras personas, obteniendo así el lucro ilícito.
Finalmente, y tras una laboriosa investigación localizaron y detuvieron al sospechoso, que tomaba diferentes medidas de seguridad, como alojarse en viviendas que alquilaba con documentación falsa, en una localidad de la provincia de Valencia.
En el registro que se practicó se intervinieron varios dispositivos móviles, que han permitido obtener más información sobre la forma de operar del detenido, entre otras aplicaciones, 20 wallets que utilizaba para canjear las criptomonedas que compraba fraudulentamente, así como documentos y tarjetas.
Gracias a toda la documentación intervenida, también identificaron a una persona de nacionalidad belga que contaba con numerosas wallet o monederos de criptomonedas, donde al parecer, el detenido enviaba los bitcoin adquiridos fraudulentamente.
Smishing
Esta modalidad de estafa consiste en que los delincuentes envían multitud de mensajes de texto maliciosos masivamente a teléfonos móviles, simulando provenir de su entidad bancaria, avisándoles de que su cuenta está suspendida temporalmente por motivos de seguridad, adjuntando un enlace para verificar su identidad, accediendo así a sus claves.
Pago fraudulento
Las numeraciones de las tarjetas de crédito obtenidas fraudulentamente no se facilitan físicamente en el momento del pago, si no que las llevan incorporadas digitalmente (enrutadas) en sus terminales móviles, al tratarse de operaciones mediante tecnología NFC, que permite el pago sin contacto y solo es necesario acercar el teléfono al terminal de venta y se realiza el pago de manera inalámbrica sin necesidad de la tarjeta física, permitiéndose así disponer de infinitas numeraciones de tarjetas de forma inmediata y accesible, además de que en caso de verse abocados a un control policial, los agentes no podrían acceder a las mismas.