Un coche patrulla de la Policía Local de Murcia, estacionado por fuera del cuartel de Espinardo, ha aparecido con todas sus lunas destrozadas y de su interior han sido sustraído dos chalecos antibalas.
Los hechos han tenido lugar durante la medianoche del pasado domingo. El vehículo se encontraba perfectamente estacionado justo por fuera del citado cuartel, cuando uno o varios vándalos han perpetrado los destrozos citados y el posterior robo de los chalecos con total impunidad.
Afortunadamente no hay que lamentar daños personales entre los agentes, que se encontraban ausentes en el momento de los hechos.
Ahora se investiga para esclarecer lo sucedido y poder proceder a la detención del/los responsable/es de este suceso. Las cámaras de seguridad instalada en la fachada del cuartel podría ser clave en el devenir de la investigación.
Se trata de daños en un vehículo de servicio público que al fin al cabo pagan todos los ciudadanos y que permanecerá en desuso un periodo de tiempo, circunstancia que indirectamente van en detrimento de los vecinos.
Los sindicatos policiales del Ayuntamiento de Murcia lamentan la precaria situación de personal por la que atraviesa la ciudad y que la inseguridad ciudadana se está apoderando de las calles murcianas sin que los responsables políticos ponga remedio al problema.