Se llama Rex y es un perro policía, recientemente jubilado, que destacó en sus años de servicio, entre otras cosas, por ser determinante en la captura de un asesino fugitivo. El k9 recibió un bonito homenaje arropado por sus compañeros, quienes le dedicaron aplausos y vítores por su encomiable labor.
En su último “mini servicio” el can, dirigido por su especialista, siguió una maleta sospechosa llevada por una fémina que sirvió de cebo para conducir al animal hasta el lugar de la celebración. En un momento dado, numerosas pelotas volaron por los aires provocando gran emoción en el perro, que no paró de disfrutar.
El agente canino tiene en su haber más de 100 detenciones a lo largo de sus ocho impecables años de servicio. Sin duda, una labor de calidad irreprochable con una más que merecida despedida y jubilación.