La Policía Nacional y funcionarios de la Agencia Tributaria, en una operación conjunta, han desmantelado una sociedad que distribuía artículos falsificados de marcas de lujo a través de Internet. En total se han incautado alrededor de 8.000 artículos y 6.000 euros en efectivo, deteniendo a los tres administradores de la empresa.
Los productos falsificados con una calidad muy alta
La investigación se inició a mediados del pasado año, tras la denuncia del representante de varias marcas de moda de reconocido prestigio contra los responsables de una página web que ofertaba multitud de productos falsificados. Durante el transcurso de la investigación estas denuncias fueron en aumento por parte de los representantes de otras marcas de moda.
Todos los denunciantes aportaban una prueba de compra, que consistía en la adquisición de varios productos de sus marcas, que remitían para su análisis a la unidad policial. Estos análisis determinaron que todos los productos eran falsificados con una calidad muy alta.
100 franquicias solo en España
Fruto de las investigaciones se identificaron a los responsables de la sociedad, cuya sede social se encontraba en Zaragoza, deteniendo a los administradores. Los arrestados habían creado páginas web con el objeto de aumentar las vías de comercio de sus productos, ofreciendo incluso a los compradores la posibilidad de crear una franquicia a cambio de una contraprestación económica de 25.000 euros aproximadamente. Los ahora detenidos se encargaban de realizar todo el montaje de la tienda para el inicio de la actividad, comprobando que solo en España habían creado al menos 100 franquicias.
Además del negocio al por mayor y las franquicias, proveían de productos a otros clientes que poseían negocios outlet tanto en España como en otros países. También habían creado cuatro tiendas en Zaragoza, más otra en proceso de apertura, generando todas ellas elevados ingresos económicos ya que dada la calidad de los productos parecían originales.
Registros en Zaragoza
Los agentes realizaron entradas y registros en la sede social de la sociedad, sus naves y tiendas anexas, los domicilios de los investigados y en los establecimientos públicos de Zaragoza. Tras analizar las cuentas bancarias de la empresa, los investigadores han contabilizado un beneficio económico de más de 5 millones de euros comprobando que formaban parte de una organización internacional dedicada a la distribución por Internet de productos falsificados de alta calidad entre mayoristas.