Descanse en paz mi teniente coronel

Pedro Alfonso Casado alias “Perico”, era un líder nato, despendía energía, vital por naturaleza. Prácticamente siempre tuvo el mismo destino en la Guardia Civil. Eso demostraba su compromiso con una unidad de élite. En la U.I.E están los elegidos, posiblemente sean los mejores, fueron seleccionados por su entrega, su valor y su capacidad para el trabajo en equipo.

Entro en la Academia Militar de Zaragoza en 1998 y apenas estuvo un año en la Unidad/Grupo de Acción Rural, para pasar en el año 2000 a la Unidad Especial de Intervención, donde permaneció siempre. Nació para ello, hace 50 años en Vitoria y allí forjó su carácter.

Es una unidad de élite, de carácter táctico, con exigencias al límite. Especialistas en secuestros, enfrentamientos con terroristas, con bandas armadas, francotiradores… encapuchados, no dejan ver su cara, esconden una sonrisa. La vida es bella y puede ser corta.

Acompañaba al negociador, dio la cara hasta el último momento, estaba en el campo de batalla, en primera línea. El disparo del asesino acabó con su vida. Hasta el su muerte luchó hasta el final, nunca se dio por vencido.

Descanse en paz mi teniente coronel.