Agentes de la Policía Nacional han detenido a cuatro personas por extorsionar a una familia para cobrar 4.000.000 de euros en criptomonedas.
La víctima estaba siendo amenazada con sufrir un daño él o su familia si no pagaba diversas cantidades de dinero de una deuda. Uno de los arrestados llegó a acceder al domicilio de la familia cuando la hija menor estaba sola en casa y a llamar desde el teléfono de ésta a su madre para ejercer presión sobre la víctima.
La investigación se inició a finales del pasado mes de octubre cuando un hombre denunció ante agentes especializados del grupo de Secuestros y Extorsiones que estaba siendo víctima de una extorsión. En la denuncia relató a los investigadores que varias personas estaban amenazándolo con hacerle daño a él y a su familia si no pagaba diversas cantidades de dinero de una deuda.
Tras anteriores extorsiones, en esta última ocasión le reclamaban desde hacía varios meses el pago de 4.000.000 de euros, que debía realizar a través de criptomonedas, en concepto de un contrato de seguridad que aun no había llegado a celebrarse entre ambas partes. La víctima debía comenzar a realizar el pago en el día que presentaba la denuncia ante los agentes, pero al no tener el dinero solicitado y no poder aguantar más la presión que estaba sufriendo decidió denunciar ante agentes de Policía Nacional, acompañado por su mujer. Relató que los extorsionadores habían proporcionado a la victima un teléfono de seguridad para recibir las llamadas y los mensajes extorsivos y tener un control remoto de los mismos lo que dificultaba la labor policial.
Extorsionadores en casa con su hija menor
En el momento en el que la víctima estaba interponiendo la denuncia, la mujer de la víctima recibió una llamada al móvil de su hija menor de edad, la cual se encontraba sola en el domicilio familiar. En ese momento, uno de los autores de las extorsiones cogió directamente el teléfono de la menor para hablar con la madre y le preguntó por el paradero de su marido. El extorsionador exigía el pago de la deuda y mostraba su máxima presión ante el hecho de que no podían contactar con la víctima, exigiendo hablar con él urgentemente y que permanecerían con la menor en el domicilio hasta que llegarán.
En ese momento, los agentes dieron prioridad a la protección de la menor y establecieron un dispositivo de seguridad para acudir al domicilio de la víctima. Si bien cuando los agentes llegaron al domicilio los arrestados ya habían abandonado el lugar, tras una inspección de las inmediaciones se localizó a cuatro personas en el interior de un vehículo cuyas características físicas coincidían con las de los autores de las extorsiones. Además, las indagaciones de los agentes permitieron comprobar que los cuatro varones habían permanecido en el lugar durante varias horas tratando de contactar telefónicamente con la víctima y su pareja. Los cuatro ocupantes del vehículo fueron detenidos y se les intervino en el maletero del vehículo un hacha, un palo de grandes dimensiones y un bate de béisbol.