Agentes de la Policía Nacional han detenido en Sevilla a cuatro personas por ser presuntamente miembros de una organización criminal, especializada en cometer robos con fuerza, usando para acceder a los establecimientos el método del butrón, formula muy extendida en los asaltos a comercios. Puestos a disposición judicial, el Juez a decretado prisión para tres de los detenidos.
El día que se llevo a cabo el registro de la principal vivienda investigada, los agentes recuperaron un total de 2.000 equipos informáticos, que habían sido sustraídos a principios de marzo en conocidos establecimientos de Sevilla, dinero en efectivo y dos vehículos, que también habían sido robados.
La investigación comienza cuando los agentes tienen conocimiento de la comisión de varios robos con fuerza, llevados a cabo empleando el conocido método del butrón, formula mediante la cual los detenidos abrían agujeros en la pared, para lo que usaban un vehiculo de gran cilindrada, cargaban la mercancía sustraída y huían a toda prisa para evitar ser descubiertos.
Analizadas las pesquisas llevadas a cabo por la policía, los agentes determinaron que los miembros de la organización habrían sustraído un vehículo Porsche de alta gama, para desplazarse a los establecimientos donde robaban mediante el método descrito, así como para huir a gran velocidad, evitando cualquier posible seguimiento policial. Del mismo modo, sustrajeron una furgoneta de grandes dimensiones, para poder cargar todo el material robado.
Los agentes pudieron relacionar los vehículos sustraídos con la perpetración de diferentes robos, entre los que se encuentra, la sustracción de más de 2.000 ordenadores portátiles y cargadores, valorados por el propietario de la empresa afectada, en más de un millón de euros.
Avanzada la investigación, esta permite a los agentes localizar una finca situada en la urbanización “El Junco”, perteneciente a la localidad sevillana de Alcalá de Guadaira. Siendo la vivienda el lugar donde los “butroneros” guardarían todos los efectos que habían sustraído en los diferentes robos llevados a cabo. Los detenidos además, eran los okupas del inmueble, junto a otras personas.
La policía solicitó mandamiento de entrada y registro para la finca objeto de investigación, siendo simultáneamente interceptado en la autovía, a la altura de Jerez de la Frontera, un camión cargado con cerca de 2.000 ordenadores, que habían sido previamente sustraídos, así como dinero en efectivo.
Tras estos hechos se procede a la detención de cuatro personas, que fueron puestas a disposición judicial, junto al camión con los efectos robados en su interior, decretándose prisión para tres de los detenidos.