En Almería se han denunciado mutuamente un Guardia Civil y el propietario de una taberna.
En un principio se conoció la versión del Guardia Civil, el cual denunciaba haber sido agredido por llevar un polo con la bandera de España.
Además hacía mención que dicha agresión también estuvo motivada por su condición de Guardia Civil.
Según la versión del guardia civil fuera de servicio, los hechos ocurrieron cuando se encontraba cenando en el restaurante “El Postigo” de Almería.
La agresión comenzó, cuando sobre las 22:00 horas del jueves, una mujer se le acercó y le dijo que “estaba invadiendo su espacio sideral con esas pintas de fascista”.
Acto seguido, llegó un camarero del local, llamándolo “fascista”, a la vez que le propinó un empujón que le tiró al suelo.
En ese momento, salieron más camareros, que llegaron a amenazarlo con unas pinzas de la brasa diciéndole: “fuera de aquí facha”
Entre varios le sacaron al callejón contiguo, donde lo volverían a tirar al suelo para propinarle infinidad de golpes durante unos cuarenta segundos.
Los agresores sólo cesarían en su agresión, cuando los acompañantes del guardia civil agredido, les advirtieron que habían llamado a la Policía Nacional.
Debido a las lesiones, fue trasladado al Hospital Virgen del Mar de Almería.
En el parte sanitario consta: “Escoriaciones en el codo izquierdo, aumento de volumen y hematoma en cabeza distal del 2º metacarpiano derecho, policontusiones y herida costrahemática localizada y contusión en la región malar izquierda”.
La versión del propietario del establecimiento y de algunos testigos es muy distinta.
Según la otra versión, expulsaron del local a esta persona, tras intentar entrar al interior de la barra.
Al parecer, el que posteriormente dijo ser guardia civil, se encontraba el alto estado de embriaguez.
Ante esto, se inició una pelea con el resultado del propietario herido en la cara y la otra parte en la pierna.
Una vez fuera del local y finalizada la pelea, permaneció casi media hora en la calle, profiriendo insultos al personal del establecimiento.
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También atribuía que le habían echado, al hecho de llevar un polo con la bandera de España.
Si bien según testigos, no se vio la bandera hasta que se quitó la chaqueta.
Según manifestación de la Asociación AUGC de la Guardia Civil en relación a los hechos, “ni ha habido una brutal paliza, ni nada que se le parezca”.
