La detención de varias personas, entre ellas un coronel, un teniente coronel y un subteniente destinados en el Servicio de Contratación de la Dirección General de la Guardia Civil, ha originado numerosas críticas en las asociaciones de la Guardia Civil, dado que lo relacionan con la pésima calidad de los uniformes que en los últimos años deben vestir los trabajadores de la Guardia Civil, dado que al parecer, esta organización habría manipulado un gran número de expedientes durante años, concretamente relacionados con suministro de prendas y con los uniformes de los agentes.
Unas prendas muy deficientes en sus materiales y confección, de muy rápido deterioro y absolutamente inadecuadas para soportar los rigores invernales y las altas temperaturas del verano, en las respectivas uniformidades de ambas estaciones.
AUGC añade, además, en su denuncia dos cosas:
- La poca disponibilidad de las prendas, ya que en ocasiones pueden transcurrir meses desde que un trabajador solicita durante el invierno un elemento de abrigo que no se le entrega hasta terminada esta estación, con el sinsentido que esto supone.
- Los derroches por decisiones respecto a la uniformidad absolutamente innecesarias. Es el caso del cambio en las gorras con distintivos para distinguir a oficiales, suboficiales y cabos, un proyecto que se expuso en una reunión reciente de la comisión preparatoria del Consejo de la Guardia Civil.
Del mismo modo, felicitan a los compañeros de Asuntos Internos que han desarrollado la investigación que ha llevado a la detención de esta presunta trama de corrupción dentro del Cuerpo.
Fotos: AUGC asociación