La Asociación Profesional de Funcionarios de Prisiones -APFP- ha denunciando públicamente los graves hechos ocurridos el viernes pasado en el departamento de aislamiento del Centro Penitenciario de Albolote en Granada, cuando un interno intentó agredir a dos enfermeras que le iban a realizar una prueba PCR.
El interno Y.B.S, clasificado como preso en primer grado, llevaba cinco días en este departamento, el mismo procedía del Centro Penitenciario de Jaén donde había protagonizado hechos muy violentos, lo que motivaron su traslado a Albolote.
Este preso, cuando iba a ser atendido por dos enfermeras que le iban a realizar una prueba PCR, levantó de forma súbita y violenta la silla en la que estaba sentado, destrozando la misma a golpes contra el suelo, y acto seguido coge otra de las sillas de la consulta médica y la lanza contra las dos enfermeras, que logran esquivarla por muy poco.
Inmediatamente, los funcionarios de prisiones de servicio en el departamento intentan reducir al interno utilizando la fuerza física mínima imprescindible y aunque ofrece una fuerte resistencia el interno es finalmente reducido y trasladado a una celda para que se tranquilice.
Es la tercera agresión en una semana, anteriormente el miércoles 27, un interno intentó apuñalar a los funcionarios y dos funcionarios fueron agredidos, uno de ellos con puntos de sutura; el jueves 28 un interno agredió a puñetazos a otros dos funcionarios.
Para este sindicato, estas agresiones se podrían minorar con la reposición de personal, a través de una oferta de empleo pública, en el Centro Penitenciario de Albolote hay una falta de personal cifrada en 86 trabajadores a fecha de 1 de diciembre y 3.434 en los centros de pendientes de la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias, además del reconocimiento de agente de autoridad a los trabajadores penitenciarios, para que las agresiones no se queden en una simple multa y medios materiales del S.XXI como la pistola Táser, la edad media de la plantilla del centro se sitúa en torno a los 55 años.
Por otro lado, la Consejería de Salud y Familias de la Junta de Andalucía debería realizar un cribado masivo a los trabajadores del centro penitenciario tal y cómo se ha pedido por APFP Albolote, con el fin de evitar el contagio masivo por personas asintomáticas, ya que a día de hoy hay 10 positivos de Covid-19 de los trabajadores del centro.
Este sindicato denuncia que se realizan pruebas PCR diariamente a los internos, pero no a los trabajadores que vienen del exterior, y tampoco después de la cuarentena por positivo al reingreso laboral. A su vez, dadas las altas tasas de contagio en la provincia de Granada y en Andalucía, solicitan a la dirección del centro suspender las comunicaciones por locutorios.