No existe estadística, o al menos no la conocemos, de los internos que mueren en cárceles españolas.
Sin embargo, alguien desde dentro de prisión, nos ha facilitado una estadística oficiosa que les facilitamos.
En la cárcel de Aranjuez han muerto 90 internos desde 2004 hasta la fecha actual, podemos estimar entre 6 y 7 muertos anuales. Tiene una capacidad de unos 1200 internos, con lo cual el dato es relevante y muy llamativo.
Las causas han sido:
1) Naturales, teniendo en cuanta que la mayoría de los internos sufren patologías severas y agudas.
2) Sobredosis de dos tipos, medicación o la combinación de medicación/drogas. Es, quizás, la causa que genera mayor número de fallecidos.
Son muertes, en su mayoría, evitables debido a que se producen sobre todo en los puentes y fiestas cuando, por escasez de personal, se reparte la medicación para varios días y los internos la consumen en su totalidad.
Los repartos de la medicación se producen tres días a la semana (lunes, miércoles y viernes), excepto puentes y festivos que se le entregan varias dosis, no hay auxiliares para repartir.
De los 1200 internos citados, 800 necesitan esa medicación… ese es el verdadero peligro.
3) Suicidios que la administración trata de disminuir implantando protocolos. Básicamente un preso de confianza acompaña al potencial suicida.
4) Muerte violenta por acción de otros internos, son las menos, si bien alguna se ha dado, son las que habitualmente los medios recogen.
La asociación de funcionarios de prisiones “TU ABANDONO ME PUEDE MATAR”, viene denunciando estas situaciones.
Se quejan de falta de personal, medios, recursos y del abandono al que está sometido el sector.
Un claro ejemplo es que no están cubiertas las plazas de médicos en el interior de las cárceles. Extremera durante este verano tuvo un solo médico para atender todas las urgencias. Las plazas de funcionarios y auxiliares no son suficientes, la desprotección es evidente.
Serafín Giraldo, dirección Periódico digital PolicíaH50
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