Las autoridades policiales de Francia, Portugal y España, con el apoyo de Europol, han detenido a 62 miembros de varios grupos delictivos organizados implicados en la pesca ilegal de moluscos contaminados en Portugal y España.
Durante los 17 días de acción se incautaron también 30 toneladas de moluscos y 6 toneladas de angulas por un valor de hasta 10 millones de euros en el mercado de productos del mar. Las autoridades consideran que seis de los sospechosos son objetivos de alto valor.
Los moluscos, asociados al riesgo de hepatitis
Las bandas criminales se dedicaban principalmente a la pesca de almejas japonesas, que son del agrado de los habitantes locales y los turistas en las zonas costeras, incluso durante las fiestas. Las bandas falsificaban la documentación de los mariscos contaminados para presentarlos como aptos para el consumo humano. Esto podría haber desembocado en un importante problema de salud, ya que el consumo continuo de moluscos contaminados pone a las personas en riesgo de contraer enfermedades graves como la hepatitis.
La investigación condujo al descubrimiento de grupos delictivos organizados involucrados en el tráfico de almejas o angulas, según la estación del año, en Francia, Portugal y España. Esto condujo al desmantelamiento de una importante red criminal involucrada en la pesca furtiva, la recolección y el contrabando ilegal de angulas.
Redes criminales que operan a nivel internacional
Un kilo de estos moluscos se puede vender en el mercado de pescado por hasta 25 euros. Las redes criminales explotaban a los pescadores, originarios de países asiáticos, pagándoles tan solo un euro por kilo de moluscos capturados. Los pescadores pescaban ilegalmente en Portugal y enviaban los moluscos a España, donde eran entregados a las redes criminales.
Por primera vez en la UE se demuestra la relación entre la trata de personas y los delitos medioambientales
La diferencia entre el precio de los moluscos en el mercado y los ingresos de los pescadores ha llevado a las autoridades a confirmar por primera vez en la Unión Europea la relación entre los delitos medioambientales y la trata de personas con fines de explotación laboral.
Europol detecta tendencia delictiva
Los expertos de Europol de la Unidad de Delitos contra el Medio Ambiente detectaron la tendencia delictiva y pusieron a disposición de los Estados miembros implicados su experiencia. Europol apoyó las reuniones operativas, coordinó las jornadas de acción y proporcionó apoyo financiero a las autoridades nacionales.
Durante las jornadas de acción, los expertos de Europol también estuvieron desplegados sobre el terreno en Portugal, España y Francia. Los resultados del análisis operativo permitieron identificar nuevos objetivos de alto valor y poner en marcha nuevas investigaciones.
Autoridades involucradas
En la operación intervinieron las siguientes autoridades policiales:
- Francia : Gendarmería francesa (Gendarmerie Nationale: Commandement pour l’environnement et la santé, CESAN; Office central de lutte contre les atteintes à l’environnement et à la santé publique, OCLAESP) Oficina francesa de Biodiversidad y Aduanas francesas;
- Portugal : Servicio de Protección de la Naturaleza y el Medio Ambiente de la Guardia Nacional Republicana Portuguesa (SEPNA/GNR) y Autoridad de Seguridad Económica y Alimentaria (Autoridade de Segurança Alimentar e Económica, ASAE);
- España : Guardia Civil Española (Guardia Civil, SEPRONA).
