Desde nuestros inicios, tanto AJPNE como RAGCE, hemos apoyado todas las reivindicaciones que hemos considerado justas y necesarias, para los miembros de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad. Hemos animado a los nuestros a asistir a todas las concentraciones donde se reivindicaban mejoras para las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, como la equiparación salarial.
Hemos dado difusión en redes a todas las noticias relacionadas con las reivindicaciones de nuestros compañeros en activo de la Guardia Civil y Policía Nacional y siempre hemos hablado positivamente de todo aquello que es necesario mejorar, aún sabiendo que tanto los que ya estamos retirados o jubilados de ambos Cuerpos, no íbamos a obtener ningún beneficio. Y es que apoyar a nuestros compañeros, es hacerlo con el corazón, es simplemente aplicar el compañerismo, palabra cuyo significado hay que volver a potenciar y que en los últimos años en ocasiones, brilla por su ausencia.
No creo que nosotros tengamos que recordar el significado de “ser compañero”, pero por si alguna persona que nos lee no sabe su significado, lo que implica o simplemente se le haya olvidado, aprovechamos para recordar que es “una relación amistosa de colaboración y solidaridad entre compañeros. Armonía y buena correspondencia”.
Evidentemente, ser un buen compañero nos proporciona muchas satisfacciones en nuestras relaciones entre nosotros, actuando con bondad, solidaridad, respeto, empatía, así como ofrecer nuestro apoyo incondicional en momentos difíciles y es por ello, por lo que aunque nuestros colectivos, ya en situación de retiro y jubilación, no nos podamos beneficiar de cualquier mejora salarial, si tenemos que apoyar las mejoras que puedan llegar en el futuro para todos nuestros compañeros y eso es ser solidario.
Y es en estos momentos, en plena acción de una incansable lucha que mantenemos desde el año 2017 en AJPNE, y desde 2018 en RAGCE, aunando esfuerzos y trabajando conjuntamente en la mejora de la calidad de vida de nuestros colectivos, cuando nos damos cuenta de la importancia que tiene recibir apoyos para alcanzar objetivos que mejoren nuestra situación actual.
Apoyos tanto de los que se encuentran en servicio activo, reserva, segunda actividad, jubilados o retirados. Si todos y decimos bien alto, todos, nos hubieran apoyado y se hubieran volcado en la recogida de firmas para la #IgualdadEnElCopagoFarmacéutico, igual que los retirados de la Guardia Civil, los jubilados de la Policía Nacional se han estado volcando hacia todos los que se encuentran en activo, desde que surgió el movimiento de la #EquiparaciónSalarial, entonces hubiéramos alcanzado nuestro objetivo, pero no interesa lo que se tendrá en el futuro, solo interesa lo que se tiene ahora y parece ser que tener dinero en el bolsillo ahora, es más importante que llegar a una edad avanzada donde lamentablemente se tienen más problemas de salud o por el contrario, se suele pensar que “a mí eso no me va a ocurrir” y se olvidan de que la vida es una lotería, “hoy estás bien y mañana te puede ocurrir a ti” Así funcionamos y así dejamos que se funcione “pan para hoy y hambre para mañana”.
Durante estos meses, desde que se presentó la segunda ILP para luchar contra el injusto Copago Farmacéutico del 30% sin límite que tenemos los retirados y jubilados de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del estado, así como el colectivo de viudedad, es decir, un colectivo que percibe pensiones irrisorias y no solo nosotros, sino todos los que pertenecen a Clases Pasivas -ISFAS, MUFACE y MUGEJU- incluidos todos los que ingresaron a partir del año 2011 en el Régimen de la Seguridad Social, TODOS, sin excepción estamos sometidos a pagar esa cantidad sin limite en los medicamentos que podamos necesitar bien por contraer una enfermedad crónica o bien por los achaques propios de la edad. Y creernos cuando os decimos que esto es una realidad, que tenemos compañeros abonando 400 euros mensuales para poder optar al tratamiento que le han prescrito los médicos. Viudas con pensiones de 500 euros y abonando 150 euros al mes en medicamentos y estos datos son corroborados y SI, existen, más de lo que os podáis imaginar.
En estos momentos y tras contabilizar las firmas recogidas, estamos realmente decepcionados, pues nuevamente hemos vuelto a sentir el abandono y pasotismo de muchos de vosotros, nuestros compañeros. Y por supuesto no generalizamos, dado que muchos os habéis volcado, habéis empatizado y habéis sido solidarios, recogiendo firmas y firmando, así como asociaciones que han estado presentes y es por ello por lo que os mostramos nuestro más profundo agradecimiento. Sin embargo, otras asociaciones han brillado por su ausencia en muchas provincias, en otras no tanto y en otras han colaborado, dependiendo del grado de implicación de los responsables provinciales, si se han involucrado o simplemente han pasado.
En estos últimos días recogiendo firmas hemos podido ser testigos de todo lo relatado, en cuanto a pliegos extraviados, otros en el más absoluto olvido en cajones y otros con apenas cinco firmas en cuarteles y comisarias con plantillas de más de cincuenta efectivos.
Aún con todo lo relatado, desde AJPNE y RAGCE continuaremos trabajando para mejorar nuestra calidad de vida y la salud es primordial a edades avanzadas y con patologías crónicas. Iniciamos esta andadura cuando nadie pensó en ello. Hemos mantenido reuniones con representantes de los Grupos Parlamentarios, tanto en el Congreso como en los despachos de muchas provincias españolas y es de sobra sabido nuestra lucha y quiénes dieron el primer paso. De nada sirve crear Plataformas para luchar por “Jubilaciones Dignas” y no haber demostrado interés por acabar con esta injusticia.
Esto nos lleva a pensar que cuando se habla de “Jubilaciones Dignas” se continúa pensando en el futuro, en lo que deseáis todos los que estáis en activo en este momento, sin importar los sinsabores de los compañeros que vivimos la jubilación y el retiro del presente. Y aun así, ahí estamos, a vuestro lado, yendo a las concentraciones, apoyando en redes por lo que es justo y teniendo en cuenta que ninguno de nosotros podrá alcanzar esa jubilación digna, al estar ya “despachados” y siendo hace treinta años los que ya iniciamos la demanda de la equiparación, en los peores años, cuando los derechos eran pocos y las obligaciones muchas, cuando la lacra del terrorismo azotaba nuestras vidas, cuando los turnos y las horas de servicio te mantenían con el uniforme prácticamente todo el día puesto. Algo más de treinta años sabíamos lo que era el compañerismo y ahora se reduce a mirarse el propio ombligo, vosotros, que apenas algunos lleváis unos años y no habéis conocido ni vivido esas circunstancias.
Os pedimos una firma, una simple firma y nos dais la espalda, pero salís a la calle a pedir una “jubilación digna”, una jubilación que creéis merecer por encima de quienes hoy en día tienen una pensión de apenas 1.100 euros. ¿Sois conscientes de esto?, no, porque muchos de vosotros no os habéis preocupado de saber, de averiguar. Hoy en día simplemente se sigue la corriente de lo que se exponga en las redes sociales, dando por bueno todo lo que se escriba, sin poner en duda nada y lo que es peor, sin informarse de la realidad.
En fin, aquí seguiremos, trabajando con ilusión, con la misma honestidad y ahínco hacia nuestro colectivo y cuando alcancemos la igualdad en el copago farmacéutico, cuando llegue ese momento, entonces los que nunca estuvieron, saldrán de debajo de las piedras para decir que “yo fui, yo estuve, yo hice”, y ¿sabéis?, nos da igual, porque de lo que se trata es de conseguir alcanzar este objetivo. Una persona sabía es consciente de que la vida pasa, nada ni nadie es eterno, entonces, seamos mejores personas, seamos buenos compañeros y seamos auténticos, seamos Guardias Civiles y Policías Nacionales de corazón, seamos Beneméritos y Ángeles Custodios también de nuestros veteranos.
Cuando ampliéis miras y sintáis la necesidad de saber, aquí estaremos. Mientras tanto continuaremos en la soledad de nuestro viaje, trabajando en nuestro presente para vuestro futuro. Y reiteramos nuestro agradecimiento de todo corazón a todas las asociaciones que provincialmente se han implicado, así como a todos los compañeros que nos han ayudado.