Con el sabor amargo por la noticia de los efectivos asesinados hace escasos días en Barbate hemos vuelto a presenciar otra acción violenta contra agentes de la Guardia Civil en Cádiz. En este caso, el damnificado ha sido un “k” -vehículo policial camuflado- de la Benemérita en cuyo interior patrullaban varios efectivos.
Los hechos tuvieron lugar este jueves, 15 de febrero, en la playa de Puente de Mayorga en San Roque (Cádiz), cuando unos contrabandistas fueron sorprendidos por los efectivos in fraganti. Tal y como adelantó EL MUNDO, entre las 06:00 y las 07:00 horas, un dispositivo de vigilancia de la Comandancia de la Guardia Civil de Algeciras avistó un Seat León negro en el que se metían fardos de tabaco recogidos de una embarcación estacionada en la playa de Puente Mayorga.
Al iniciarse la acción por parte de los funcionarios, la embarcación se dio a la fuga dejando sólo al conductor del vehículo empleado para el delito. Ya cerca del objetivo, le dieron el alto infructuosamente, pues el responsable se subió rápidamente al coche y emprendió la fuga. Y así, el vehículo del Instituto Armado se dispuso en mitad de la vía para evitar que el otro turismo accediese a una calle próxima para escapar. En esas, el delincuente embistió al “k” por la parte de atrás.
Gracias a esta acción, el sujeto tuvo que marchar a pie para poder continuar con la huida porque su coche había quedado inutilizado tras el golpe. Al final, se lanzó al agua y ahí fue detenido por los agentes acusándolo de contrabando, de atentado y desobediencia a la autoridad.
