Por Antonio Jesús Gómez Montejano*
Explicar qué es la International Police Association (IPA) en unas cuantas líneas no resulta fácil. Lo mejor para ello sería poder transmitir todas y cada una de las experiencias que cada socio de esta gran familia policial ha tenido ocasión de vivir. En mi caso, como en el de muchos compañeros aficionados a viajar por el mundo, hablar de tan prestigiosa asociación internacional de policías sería recordar las maravillosas e insólitas vivencias que he ido acumulando a lo largo de mis más de treinta años de pertenencia a IPA.
Como la de encontrarme solo en Sudáfrica y contar con la asistencia y la compañía de los socios de ese país invitándome a cenar y llevándome a conocer los lugares de mayor interés; visitar la casa de un compañero de Japón conociendo en profundidad la forma en que allí viven, asistir a un interesante curso en el castillo de Gimborn, en Alemania, donde se encuentra la academia internacional de la asociación, y alojarme después en una de las denominadas Casas IPA de ese país a un precio irrisorio, tan solo por poner unos pocos ejemplos.
Fraternidad
Para otros ha sido poder contactar, gracias a IPA, con su hija, residente en Nueva Orleans en el momento en que la ciudad fue arrasada por el huracán Katrina, tras sufrir horas de angustia al no poder saber su estado. O que el hijo de una socia, que estudiaba en Canadá, tuviera el apoyo de los compañeros de la Sección Nacional de IPA de ese país después de ser estafado por los arrendadores de la vivienda en la que se alojaba y verse literalmente en la calle. Recientemente son muchas las muestras de solidaridad que también se han llevado a cabo con familiares de compañeros de IPA Ucrania, acudiendo a la frontera a llevar alimentos o acogiendo a refugiados en los propios domicilios de socios españoles.
Actividades
Podría seguir contando montones de situaciones como esas, o describir tan solo algunas de las muchas actividades de todo tipo que se realizan desde esta Asociación, de carácter formativo, cultural, deportivo o social. Por poner un solo ejemplo, mientras que escribo esto, varios compañeros de la delegación de IPA en la Comunidad de Madrid están disfrutando de una original actividad consistente en realizar un vuelo en ultraligero, seguido de una suculenta comida de confraternidad. Pero a lo largo de cada año también se organizan encuentros de coleccionismo, campeonatos de tiro y de fútbol, cursos de buceo, de esquí, salidas en moto o bicicleta…qué sé yo, cualquier afición es posible desarrollarla junto a otros compañeros perteneciendo a esta entrañable organización.
Nueva presidencia
Si, además, después de tantos años disfrutando, organizando o teniendo conocimiento de todas estas experiencias, una gran mayoría de compañeros deciden depositar en mí su confianza para presidir la Sección de nuestro país, la sensación que se llega a sentir es abrumadora. No solo por la satisfacción personal y el agradecimiento a todos ellos, sino por la gran responsabilidad que uno asume con un cargo con el que se representa a más de doce mil personas.
Tras la asamblea celebrada en Zaragoza el pasado 2 de abril, la candidatura que yo encabezaba salió elegida para formar la Junta Directiva Nacional de IPA. Debido al retraso en su celebración, principalmente provocado por la pandemia, la legislatura será más corta de lo habitual. Pese a ello hay mucho trabajo por hacer. Y el principal es tratar de conseguir una unión plena entre todos los socios y sus representantes, cosa que no siempre se da en el seno de la mayoría de las asociaciones. Pero cuando al menos se tiene la voluntad de hacerlo siempre puede resultar más fácil que en el caso contrario.
Congreso internacional IPA
Tenemos también el reto de organizar con éxito el Congreso Mundial y la Semana de la Amistad de IPA que este año tendrá lugar en España en el mes de octubre. Si bien los miembros de la Junta anterior ya habían realizado un excelente trabajo en este sentido que es digno de agradecer. Más de un centenar de delegados de los distintos países del mundo que conforman la IPA se reunirán en Barcelona y visitarán después Madrid y sus alrededores.
Otro objetivo es el de seguir creciendo, para que todos los miembros de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad de nuestro país puedan beneficiarse de las múltiples ventajas que supone formar parte de IPA. Una de las formas de conseguirlo invitar a todos a visitar la web de la Sección Nacional o las de cada una de las Delegaciones de las respectivas Comunidades Autónomas, y otra, por supuesto, es a través de la difusión que nos brindan medios como h50 Digital que ahora publica este texto, y al que agradezco profundamente su deferencia.
El lema universal de IPA es SERVO PER AMIKECO, una frase en esperanto que significa SERVICIO POR AMISTAD. Y lo dice todo: ayuda y serás ayudado.
(*) Antonio Jesús Gómez Montejano es el actual presidente de IPA España, comisario de la Policía Municipal de Madrid y escritor