Los delitos cibernéticos con asistencia de inteligencia artificial apenas han comenzado: el material de abuso sexual infantil (MASI) con asistencia de inteligencia artificial es una amenaza preocupante que requerirá un seguimiento minucioso. Los casos de MASI alterados y completamente artificiales con inteligencia artificial plantearán desafíos cada vez mayores para las investigaciones policiales, no solo en términos del volumen de MASI en circulación, sino también para la capacidad de los investigadores de identificar la verdadera identidad de las víctimas y los agresores.
Abuso de tecnologías: los delincuentes utilizan cada vez más las plataformas de comunicación de cifrado de extremo a extremo (E2EE) convencionales. El marco regulatorio actual para la protección de las comunicaciones personales a través de E2EE crea desafíos digitales para el acceso legal de las autoridades policiales a las comunicaciones delictivas.
El futuro de las amenazas de las criptomonedas: el uso de criptomonedas en diversas áreas delictivas se ha vuelto más evidente. Varios avances en el mercado de criptomonedas tendrán un impacto significativo en el abuso de criptomonedas por parte de los delincuentes en el futuro cercano. Los estafadores podrían aprovechar el auge de los fondos cotizados en bolsa (ETF) relacionados con las criptomonedas.
Desafíos digitales: las fuerzas de seguridad deben mantenerse a la vanguardia
Para hacer frente de forma rápida y eficaz a las principales amenazas señaladas en la IOCTA 2024, las fuerzas del orden necesitan disponer de los conocimientos, las herramientas y la legislación adecuados. A medida que los delincuentes se adaptan, las fuerzas del orden y los legisladores también deben innovar para mantenerse a la vanguardia y tratar de sacar provecho de las tecnologías nuevas y en desarrollo. Esto, a su vez, requiere formación para generar las capacidades especializadas necesarias para investigar delitos cibernéticos técnicamente complejos o que suponen un reto, como los relacionados con el abuso de criptomonedas o la red oscura.
Europol está abordando estos desafíos digitales con su Estrategia para ofrecer seguridad en colaboración . La agencia está a la vanguardia de la innovación en materia de aplicación de la ley y actúa como plataforma de conocimiento para la provisión de soluciones policiales de la UE en relación con el cifrado, las criptomonedas y otras cuestiones. De este modo, Europol amplía la caja de herramientas disponible para los agentes de las fuerzas de seguridad en toda Europa y más allá, aumentando sus capacidades técnicas y forenses. El Centro Europeo de Ciberdelincuencia (EC3) de Europol es el primer punto de contacto para los investigadores de ciberdelincuencia.