Soy militar desde hace más de 30 años, siempre me he sentido orgulloso de servir a España y aunque creo que nadie que elige esta profesión espera oír elogios ni recompensas más allá de hacer bien su trabajo y cumplir con su servicio bien es cierto que no dejas de apenarte cuando ves que algunas instituciones, políticos, sindicatos, etc, no valoran adecuadamente el sacrificio que esta profesión exige y ya no me refiero únicamente a aquellos hombres y mujeres que se dedican a este oficio sino también el enorme sacrificio que exige a sus familias.
Algunos llevamos muchos años luchando por los intereses de la Escala de Tropa y Marinería, con una preocupación absoluta por el problema que tienen y tendrán nuestros compañeros que tengan que dejar las Fuerzas Armadas al llegar a los 45 años. Después de más de 20 años dedicado a su país se encontrarán en una situación donde se enfrentarán a un mundo laboral muy complicado, sin una formación adecuada en muchos casos ya que el ejercicio de la profesión militar poco tiene que ver con la vida civil.
Por eso llevamos luchando desde hace años, para que el Ministerio de Defensa se preocupe de estos compañeros como máxima prioridad, para que las instituciones ya sean estatales, autonómicas o municipales entiendan que esto no es un problema de los militares, es un problema de Estado. El compromiso y la dedicación que se les ha exigido debe ser recompensado de una forma digna, proporcionándoles como poco la formación y las salidas laborales adecuadas para que no vean que después de una vida de entrega y sacrificio a su país han caído en el olvido como está pasando.
Los compromisos políticos parecen olvidarse una vez que tienen los medios para remediarlos y los esfuerzos que se están viendo en este último periodo no dejan de encontrarse barreras de otras instituciones, como si reservar una serie de plazas para los militares que deben abandonar las Fuerzas Armadas conllevase por ende la militarización de un sector, como ejemplo la reserva de unas pocas plazas para el cuerpo de Bomberos de Huesca, inmediatamente recurrida y paralizada. Da igual que esas plazas se reservarán para compañeros de la Unidad de Emergencia que cuentan con la formación y la experiencia más que sobrada, da igual que lo único que se pretendía es dar una salida digna a estos compañeros sin regalarles nada, solo que tuvieran unas plazas reservadas, pero pasando las mismas pruebas que el resto.
Lo último y lo que me ha llevado a escribir esto ha sido la noticia sobre la posible reserva de plazas para los Cuerpos de funcionarios de prisiones. El comentario en la radio de un representante sindical me llevó a entender que realmente no se tiene ni el conocimiento ni la sensibilidad sobre el problema que tienen los militares cuando lleguen a tener que dejar las FAS. En este reportaje el representante sindical aludió a que los militares de tropa no tienen la formación adecuada ya que entran con la ESO, además dejó claro que las funciones militares nada tienen que ver con los funcionarios de prisiones. Evidentemente señor, el trabajo en las Fuerzas Armadas es muy variopinto y nada tendrá que ver con su labor, la cual, sin duda alguna, será muy profesional y respetable, pero imagino que cuando entran ustedes desde la vida civil no tendrán los conocimientos adecuados, tendrán que formarse y esta formación empieza con el estudio de los temarios para la oposición, lo mismo mal interpreto la reserva de plazas para los militares de tropa con regalarles la plaza.
A los militares nadie les ha regalado nada, muchos de ellos llevan a sus espaldas 2 ó 3 oposiciones para acceder y ascender a los distintos empleos, cierto es que entraron con la ESO pero muchos de ellos tienen la formación académica necesaria para poder opositar al cuerpo de funcionarios de prisiones y su formación deberá estar en igualdad de condiciones respecto al resto de los opositores que entren y tengan que superar dicha formación. Los militares no piden que les regalen nada, pero sí que se les tenga en cuenta sus años de servicio a su país, que se reserven un número de plazas para ello. Así que todo esto no implica militarizar un cuerpo como decía usted, significa solo que tendrán acceso a una reserva de plazas.
Que los militares de tropa ingresen en distintos cuerpos, solo significa que se reconocerá su labor, que se valora y se servirá de su experiencia acumulada, desde luego en ciertos valores que a buen seguro son necesarios para cualquier profesión, como es el sacrifico, el trabajo en equipo, la rectitud y cumplimiento del deber, esos valores no se aprenden de la noche a la mañana, están inculcados en nuestros militares.
Qué envidia me da ver como otros países no solo valoran a sus Fuerzas Armadas en las encuestas y los foros sociales, les valoran y reconocen su trabajo aportándoles salidas profesionales y consideran como un mérito servir en los Ejércitos de su país. Que nadie olvide que los militares no dejan de ser ciudadanos como los demás y cuando tengan que dejar las Fuerzas Armadas si no nos preocupamos de ellos acabarán en las listas del desempleo y entonces serán un problema de todos…solo entonces serán un problema de todos.
Los militares son un problema de todos porque es a su país al que sirven y al conjunto de todos los ciudadanos, no entienden de política ni de colores y lo único que hacen es trabajar por y para su país.
“Aquellos que no entienden el trabajo de los militares porque saben poco o nada de lo que hacen, deberían saber que muchos pasan gran parte de su vida en estas condiciones, pasando frio o calor pero cumpliendo con su trabajo, lejos de sus casas y sin ninguna comodidad, pero siempre cumpliendo con su trabajo”.
Ojala llegue el día en el que cuando se hable de los militares, lo que se vea es a ciudadanos, compañeros que desarrollan un trabajo de sacrificio, de excesos de horas, de días y meses alejados de sus familias, de arriesgar sus vidas cuando hace falta y todo ello por un sueldo de 1000€.
Casiano Sánchez Pérez – vicepresidente de ATME
Que buen artículo, esperemos que no quede en el olvido y que los que los gobiernen reflexionen un poco si es que les quedan alguna neurona.
Lo primero que tienen que hacer nuestros políticos y sindicalistas es reconocer las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado como se merecen y que no lleven a cabo actuaciones que impliquen una sociedad más justa y libre…
Es insostenible…
Así que es cuestión de ponerse las pilas, porque en pleno siglo XXI los valores éticos, morales , en respeto por una convivencia mejor entre los pueblos son necsarios para un mundo mejor. En definitiva educación, educación y educación…
Así que sentido del humor que no falte; si o si monstruo de las galletas que no te enteras…