Se acabó la impunidad del top manta en Madrid. La entrada del nuevo ejecutivo al Ayuntamiento de Madrid ya se ha hecho notar con la puesta en marcha de la operación Tall que arroja un detenido y la incautuación de 1.086 prendas falsificadas.
Un detenido y más de 1.000 productos falsificados incautados en una operación contra las mafias del "Top Manta" en Lavapiés llevada a cabo por miembros de la UID de #Centro Sur y la Unidad de Investigación y Coordinación Judicial #UICJ.
Más info👉🏼https://t.co/tYnxxkW64t pic.twitter.com/2KipY4k40a— Policía Municipal de Madrid (@policiademadrid) July 3, 2019
La operación, desarrollada por miembros de la Unidad Integral de Distrito de Centro Sur, y de la Unidad de Investigación y Coordinación Judicial, se inició el pasado 1 de julio con la detención de un individuo de origen norteafricano, acusado de un delito contra la propiedad industrial.
La agentes lo sorprendieron en el barrio de Lavapiés con 1.086 productos falsificados, en su mayoría equipajes de reconocidos equipos de fútbol, dispuestos para su inmediata comercialización ilegal por las calles de la capital de España.
La investigación sigue abierta y no se descartan nuevas detenciones.
Cambio de rumbo
Esta operación significa un cambio de rumbo respecto a las políticas anteriores en torno a la lucha contra el top manta. Durante los años que gobernó Carmena (2015-2019), la intervenciones policiales contra las mafias que mueven los hilos del top manta en Madrid descendieron a números insospechados.
En 2014, coincidiendo con el gobierno de Ana Botella (PP), se acometieron 14.131 intervenciones contra la falsificación, viéndose reducida a la mitad en 2018, con tan solo 7.659.
A tenor de estos números, no era casualidad ver las principales calles de Madrid, como Arenal o Gran Vía, atestadas de top mantas, vendiendo impunemente miles de productos presuntamente falsificados.
Se avecina una nueva era donde los comerciantes, que pagan sus impuestos, puedan subsistir sin competir contra manteros apostados en las puertas de sus negocios vendiendo falsificaciones y sin ningún tipo de control; donde vecinos y turistas, puedan caminar por las aceras y áreas peatonales, cedidos en los últimos años a las mafias que mueven los hilos del top manta.
¿Realidad o ficción? lo sabremos en los próximos meses.