La juez envió al jefe de Policía Judicial en Algeciras a prisión sin fianza y comunicada por varios delitos. Se le investiga por revelación de secretos, omisión del deber de perseguir delitos, prevaricación y pertenencia a grupo criminal.
Joaquín Franco llevaba veinte años en Algeciras como Guardia Civil. Primero como suboficial, después como teniente y por último como capitán.
Era el jefe de la Policía Judicial de Algeciras.
El miércoles por la tarde fue detenido por sus compañeros de asuntos internos por su presunta vinculación con el narcotráfico.
Lo más llamativo es que a ninguno de sus compañeros le sorprendió su detención. Era algo sabido o mucho han tardado, eran las frases que se escuchaban de los guardias civiles del grupo de estupefacientes.
En 2009 fue condecorado por la Subdelegación de Gobierno de Cádiz por su lucha contra el tráfico de estupefacientes en el Estrecho.
El Juzgado de Instrucción 4 de Algeciras dictó prisión provisional sin fianza. Ingresó en la prisión de Botafuegos (Algeciras).
Se le investiga por revelación de secretos, omisión del deber de perseguir delitos, prevaricación y pertenencia a grupo criminal.
Su nombre apareció en escuchas telefónicas relacionadas con movimientos de mercancía en la costa de Algeciras.
Asuntos internos de la Guardia Civil, con la colaboración de la Policía Nacional, investigaban a J.F. por su relación con grupos de narcotraficantes. En especial con una red desarticulada en enero.
La Policía Nacional grabó una reunión el año pasado entre el Capitán de la benemérita y el narcotraficante Emilio el moro.
En el registro efectuado en dependencias del detenido localizaron más de 25.000 euros y varia documentación.