Ocurrió en la prisión de Soto del Real, un recién ingresado en el Módulo 1, mata a golpes a su compañero de celda, un hombre de 55 años que cumplía condena por tráfico de drogas.
Hace pocos días os relatábamos la noticia, un hombre en la estación de metro de la Plaza Elíptica en Madrid, tras robar un teléfono móvil apuñala a la víctima.
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Hoy conocemos más datos; tras unos minutos de desconcierto, en los que el agresor trata de huir, es interceptado por Vigilantes de Seguridad y Policías Nacionales, donde un Vigilante de Seguridad resulta herido leve.
El agresor mantiene su actitud agresiva en todo momento y únicamente puede ser reducido cuando uno de los Agentes de la Policía Nacional le apunta con su arma reglamentaria.
Es entonces cuando el agresor depone su actitud y es desarmado, reducido y engrilletado.
Una vez detenido y hechas las Diligencias oportunas, es puesto a disposición judicial, ordenando el Juez su ingreso preventivo en la prisión de Soto del Real.
A la espera de que se le realicen los exámenes médicos y psicológicos oportunos, el preso es ingresado en el Módulo 1, aquél destinado a presos poco conflictivos.
Se le asigna como compañero un hombre de 55 años, experimentado en los usos y constumbres de la cárcel y no conflictivo, ya que el recién ingresado es la primera vez que es recluído en una prisión.
Según fuentes penitenciarias, tras la cena se inicia una discusión entre ambos. El motivo, según nos informan, es porque no se ponen de acuerdo sobre “quién duerme en la litera de arriba y de abajo”.
Una vez en su celda continúa la discusión, iniciándose entonces una pelea en la que el nuevo recluso apalea con puñetazos y codazos a su compañero.
Al advertir los gritos los funcionarios de prisión acudieron a la celda y pudieron comprobar, según sus propias declaraciones, “como la víctima tenía el rostro desfigurado y la cabeza destrozada”.
Aun así, tras inmovilizar al agresor, trataron de realizar maniobras de reanimación, sin éxito alguno.
Poco después, una dotación de SUMMA confirmó el fallecimiento, todavía se desconoce si fue a causa de los golpes, o bien fue estrangulado antes de ser golpeado, la autopsia determinará la verdadera causa de la muerte.
El apodado como “El nene”, de 28 años, que acumulaba varios logros deportivos como luchador de Muay Thai, en la categoría de 67 kilos, finalizó su primera noche en prisión en el módulo de aislamiento, a la espera de ser puesto de nuevo a disposición judicial.
