Esa es la cruda realidad estadística que padecen las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, y es que las cifras no mienten, los datos que fueron facilitados por el Gobierno al Partido Popular tras haber sido requeridos.
Y es que en en el transcurso del año 2020 se produjeron 8.092 agresiones a agentes de la Policía Nacional y 3.111 a guardias civiles, lo que supone una media de más de 30 ataques diarios a miembros de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, unos hechos a los que el Gobierno tiene que buscar y dar solución.
Llama la atención las agresiones sufridas por los policías y guardias civiles en el Campo de Gibraltar, y es que sólo el año pasado fueron agredidos 170 policías nacionales y 20 guardias civiles.
Entre las medidas que propone el PP está romper cualquier colaboración o pacto político con los partidos o grupos que no condenen la violencia contra los cuerpos policiales.
También se defiende modificar la legislación para reforzar el carácter de agente de la autoridad de sus integrantes, establecer protocolos de colaboración junto con las Comunidades Autónomas y Ayuntamientos para evitar los actos de violencia contra las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad e instar a todos los niveles la investigación y sanción de estos actos. Modificar la legislación para reforzar el carácter de agente de la autoridad de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad.
Y eso que no han contabilizado a los miembros de las Policías Locales y Autónomas que, como casi siempre, no cuentan para casi nada, sobre todo los Locales. Bueno, si, cuando les interesa si cue tan con ellos.