Alexa, la asistente virtual de voz de Amazon, podría ser la prueba definitiva para esclarecer un asesinato ocurrido en Florida (EEUU).
Los hechos sucedieron en julio, en la ciudad de Hallandale Beach, ubicada en el condado de Broward, del estado de Florida.
Según piensa la policía de esa ciudad, los dos dispositivos Echo que se encontraban en el domicilio de la víctima podrían haber oído y grabado sus últimas palabras.
Silvia Galva de 32 años, tenía en su casa dos dispositivos Echo, los cuales se conectan a Alexa.
Alexa, único testigo.
Alexa es un servicio de voz, ubicado en el Cloud (la nube), para reproducir música, realizar llamadas, configurar alarmas, etc.
Pero también graba todo aquello que se dice tras pronunciar la palabra “Alexa” u otra palabra escogida por el propietario para activar el dispositivo.
Por esto, la policía solicitó a Amazon las grabaciones de los dos dispositivos Echo de la casa.
Con esto pretenden esclarecer la muerte violenta de Silvia Galva, de la que está acusado su novio Adam Reechard Crespo, de 43 años.
Versión del acusado.
Crespo le dijo a la policía que el día de los hechos, Silvia y él estaban discutiendo, cuando ella cogió una lanza que había en la casa.
Él se dio la vuelta y cuando volvió a mirar a Silvia, tenía clavada la lanza en el pecho.
Pensando que la herida no sería muy profunda, cogió el arma y se la sacó del pecho.
Amazon ha hecho entrega de las grabaciones a la policía, las cuales están todavía analizándose.
Según informó el portavoz de Amazon, los dispositivos Echo y Echo Dot, están siempre alerta de escuchar la palabra que las activa, “Alexa”.
A partir de escuchar esa palabra u otra elegida como “activadora” por el propietario, comienzan a escuchar y grabar.