Tras un larguísimo infierno judicial, angustia y desazón; se ha hecho justicia. Los tres policías nacionales imputados por homicidio en el cumplimiento de su deber han sido absueltos al considerarse que actuaron en legítima defensa.
Un jurado popular de de la Audiencia Provincial de Madrid ha sido el responsable de que muchos vuelvan a creer en la justicia. Los agentes se vieron forzosamente obligados a neutralizar a un joven de 21 años en el rellano de su domicilio en Vallecas. En sus informes finales, las fiscal modificó su acusación y solicitó libre absolución por legítima defensa.
El suceso en cuestión se remonta a la tarde del 26 de noviembre de 2021 -casi tres años de espera-, cuando tres efectivos fueron comisionados a un edificio del municipio español. Una vez allí, subieron en ascensor a la novena planta y al salir, en un espacio de un metro, les sorprendió el joven corriendo violenta y directamente hacia ellos esgrimiendo un cuchillo.
Los agentes se vieron obligados a hacer uso del arma reglamentaria realizando hasta 19 detonaciones. El sujeto perdió la vida a causa de un shock hipovolémico como consecuencia de los cuatro impactos que recibió en la zona abdominal.
Durante el juicio, sólo uno de los efectivos empleó su derecho a la última palabra, asegurando que tanto el como sus compañeros actuaron para proteger sus vidas: “Kevyn no nos dejó más opciones”. La familia del fallecido pidió, sin embargo, cinco años de cárcel por una eximente incompleta al considerar que debían tener algún tipo de responsabilidad por lo sucedido.
El chico tuvo que ser engrilletado durante la asistencia sanitaria dado su elevado grado de excitación por consumir éxtasis, entre otras drogas. Los forenses alegaron tras la autopsia que había consumido hasta tres tipos de droga.
El sindicato JUPOL ha querido denunciar que “no se puede someter a este calvario simplemente por cumplir con su deber”. Igualmente, ha pedido a la Dirección General de la Policía apoyo a los policías nacionales. “Hacer un plan sobre el uso de la fuerza y las armas de fuego para dar unas coberturas jurídicas a policías nacionales y que esto no vuelva a suceder”, expresaba el sindicato tras el juicio.
Así pues, los policías han sido absueltos tras la eterna pesadilla por hacer bien su trabajo.
