Para el sindicato policial UFP, el caos en el que se están convirtiendo determinadas dependencias del Aeropuerto Internacional Adolfo Suárez Madrid Barajas en las últimas semanas, está suponiendo un riesgo importante, tanto para los policías que trabajan en dichas instalaciones, como también para los ciudadanos y la propia seguridad del tráfico aéreo.
Según la citada organización sindical, el hacinamiento en las salas de inadmitidos, tanto de la T1 como de la T4, con capacidad para 50 personas cada una y donde se encuentran más de 150 personas, está poniendo en riesgo la seguridad de los apenas dos policías encargados de su custodia, que lo están haciendo en unas condiciones de insalubridad impensables hasta ahora.
Además, continúan, de la sobrecarga de estas salas, tenemos una plaga de chinches y cucarachas, una falta de personal policial que ha hecho que se hayan producido ya dos fugas y en el día de ayer se haya podido frustrar otra más, los fugados huyendo por las pistas del aeropuerto poniendo en riesgo la seguridad aérea y, sin que hasta la fecha, se hayan aportado soluciones eficaces y efectivas
Por ese motivo desde la organización sindical, solicitan que por una parte de AENA, la habilitación de nuevas instalaciones en las que poder reubicar las salas de inadmitidos con capacidad suficiente para la actual demanda y, por otra parte, al Ministerio del Interior, que cubra de una vez por todas las 200 vacantes que existen en la plantilla de dicho aeropuerto para así poder garantizar la seguridad y poder prestar un servicio eficaz en unas instalaciones que son reflejo de nuestro país para visitantes y usuarios