Francisco Javier Almeida, autor del asesinato y agresión sexual de un niño de nueve años llamado Alex en la localidad de Lardero. La muerte del menor fue cruelmente violenta, a pesar de que se activaran las alarmas a los pocos minutos de su desaparición de donde se encontraba jugando con otros niños, este accedió a ir “conocer a los pajaritos” que este tenía en su casa.
Pero, días antes, algunos padres de dicha localidad, fueron a la policía a advertir de que había un merodeador por el parque de los pequeños y además les observaba desde una ventana, en la que en una ocasión intentó convencer a una de las niñas para ir a su casa, pero no fue suficiente pues no se pudo evitar el luctuoso desenlace.
Con estos datos, podemos tratar de trabajar en un hecho que lamentablemente se produjo por la falta de conocimiento de que un asesino y depredador sexual, reincidente, residía en una localidad en la se que desconocía tal situación y que este no recibía un seguimiento tras su “carrera delictiva”, que además, no recibió ningún tipo de tratamiento mientras cumplía su condena, por lo que, no existía ningún signo de arrepentimiento por parte del propio agresor.
Con este tipo de delincuentes libres tras cumplir sus condenas, en las que recuerdo que a día de hoy con la nueva ley “sí es sí”, siguen excarcelando a depredadores sexuales, incluso antes de lo que se les condenó con la ley anterior; siendo un hecho del que podría haberse evitado, el propio Gobierno, Ministerio y en definitiva, todos los políticos, deberían tratar de luchar y trabajar en una remodelación de dicha la ley, buscando solucionar este tipo de crímenes, en el que “Alex fuese el último” en haber sufrido tal macabro suceso.
Debemos tener en cuenta en este caso lo que Francisco Javier Almeida ha ido relatando desde que fue detenido mientras intentaba deshacerse del cuerpo de la víctima hasta el final del juicio. Para la Criminología es vital conocer todos los puntos claves a la hora de poder tratar a estos individuos y así realizar unas futuras prevenciones para la sociedad, además de ser necesario saber por parte de los mismos, como puede suceder, en qué nos debemos fijar en un momento dado, si vuestros hijos se sienten intimidados poder tratar de evitar un posible acto delictivo posterior, por ejemplo.
La información es fundamental para que todo el mundo entienda la situación y que además dicha muerte sirva para evitar futuros delitos de índole sexual entre otros, formulando una cuestión relevante, pues, tras cumplir condena un delincuente que no ha recibido tratamiento para su futura reinserción ante la sociedad, ¿debe ser publicada puesta en libertad alertando de una posible reincidencia? ¿La policía debería tener una alerta concreta para este tipo de delincuentes? Esto último, conectados entre sí, para una mayor rapidez a la hora de poder iniciar una investigación, creando una posible alarma concreta en caso de una llamada de auxilio o similares circunstancias, se trata de dar una mayor efectividad y que la propia sociedad sienta que llamar es establecer un punto de convicción no solo por parte de las fuerzas de seguridad; una forma de establecer un punto de seguridad para las posibles víctimas.
En consecuencia, nos hayamos ante una falta de protección y de una ley en condiciones para establecer una seguridad clara y que se pueda proceder por parte de las propias fuerzas de seguridad, en las que desafortunadamente se ven anclados ante un sistema que no funciona, siendo clave, vuelvo a repetir el estudio y el trabajo en una época actual, en el que los delitos sexuales seguirán creciendo de manera exponencial, y a los hechos nos remitimos, teniendo en cuenta el último trimestre de este año 2023, vemos semanalmente casos de violaciones, asesinatos, etc y el propio gobierno sigue manteniendo el silencio por respuesta.
Por lo tanto, no debemos dejar que este tipo de sucesos sigan creciendo, sigan cometiéndose, se deben cambiar los protocolos, se debe incrementar programas de prevención, insistir en la sociedad, en los centros educativos, en los puestos de trabajo, todo tipo de formaciones necesarias para llevar a cabo una futura erradicación, o al menos disminuir hasta el mínimo porcentaje en la que actualmente es desfavorable y el excarcelamiento es más previsible para delincuentes sexuales, entre otros.
Para terminar, una forma efectiva de prevenir la violencia sexual, es la prevención primaria, teniendo en cuenta la detección para así evitar que pueda ocurrir, los esfuerzos de prevención por parte de todos es una necesidad, para su buen funcionamiento, estos deben combatir los factores de riesgo en todos los niveles, tanto de manera individual, comunitaria y en toda la sociedad.
Ayudemos a crear un ambiente seguro, que los menores crezcan y sean educados ante la solidaridad, la corresponsabilidad en la atención y la protección de los menores, interaccionar con aspectos positivos, enseñando la facultad de valores y respeto.