Ocurrió en Móstoles en el Puente de Renfe, casi a la una de la madrugada del tercer día del año.
El indicativo zeta 603 de la localidad y un vehículo de la policía local Alfa 1, con dos policías cada uno, escuchan por la emisora que un hombre se iba a tirar a las vías del tren.
Tardaron apenas minutos en llegar. Encontraron al hombre subido a la pantalla de protección del puente, un joven que no llegaba a los 30 años.
Estaba decidido a arrojarse al vacío, una altura de 15 metros sobre las vías del tren.
Los agentes realizan una maniobra de distracción y poniendo en peligro su vida evitan que caiga al vacío agarrándole de la cintura y consiguiendo poner a salvo al suicida.
Hablaron con él hasta la llegada del SUMA, “confidencias de patrulleros” que no desean relatar.
El equipo médico decide trasladarlo a un centro hospitalario, pero el hombre quería ir con nuestros compañeros que le ofrecen absoluta confianza, está agradecido, el responsable del SUMA autorizó el traslado en el indicativo policial.
A nosotros también nos la ofrecen, gracias compañeros por vuestra labor diaria.
Esa es vuestra única recompensa.