ACAIP-UGT, sindicato del ámbito penitenciario, quiere poner en conocimiento de la opinión publica la intervención de un importante alijo de móviles y droga en los accesos a la prisión de Valdemoro el pasado jueves veinte de octubre.
El hallazgo tuvo lugar en la sala de espera de familiares dentro del departamento de comunicaciones exteriores. En un cacheo rutinario, a los funcionarios de servicio les llamo la atención la presencia de una bolsa nevera dentro de una papelera, en su inspección encontraron en su interior 10 teléfonos móviles y muchos envoltorios con sustancias que por su apariencia podría tratarse de hachís, heroína y cocaína, estando pendiente de análisis.
De momento se desconoce quién pudo dejar la mochila nevera dentro de la papelera, así como quien o quienes eran los destinatarios del paquete. No obstante, los responsables de la cárcel sospechan de los internos de confianza de la dirección, que se encargan de la limpieza de la sala de espera, así como jardines, recinto exterior, etc. y que salen a diario desde el interior del centro. Por este motivo cuatro de ellos fueron sometidos a interrogatorio y se les aplico el artículo 243 del Reglamento Penitenciario, ordenando su ingreso inmediato en el departamento de aislamiento del Centro Penitenciario.
Entre los 10 móviles encontrados con sus respectivos cargadores, había otros más pequeños o micro móviles, del tamaño de una moneda de dos euros, indetectables para los actuales sistemas de control.
Desde Acaip quieren felicitar a los compañeros que intervinieron y darles las gracias públicamente por su buen hacer.
Una vez más los hechos vienen a demostrar que los canales habituales de entrada de móviles y droga en la prisión de Valdemoro son las visitas, los internos que regresan de permisos y los lanzamientos de pelotas desde el exterior.
Entienden que es necesario la modernización de los sistemas de control y detección, así como los inhibidores de frecuencia en los centros penitenciarios para dificultar el uso fraudulento de estos teléfonos. Además, es preciso dotar de lo medios materiales, humanos y jurídicos oportunas para poder realizar el trabajo de manera correcta en los centros penitenciarios españoles.