Los delincuentes contactan con la victima a las que logran engañar haciéndose pasar por sus hijos para solicitarles de manera urgente una cantidad de dinero para hacer frente a un problema inmediato.
En caso de recibir una comunicación de este tipo, la Policía Nacional recomienda no perder la calma y asegurarse antes de hacer ningún pago de que la persona que está contactando es realmente un familiar.
La Policía Nacional alerta que ha detectado una proliferación de estafas cometidas a través de WhatsApp, en especial una modalidad de estafa conocida como “hijo en apuros”. Este modus operandi suele empezar con un mensaje de WhatsApp en el teléfono de la víctima con un texto similar al siguiente: “Hola mamá. Mi otro teléfono está roto. Este es mi nuevo número que puedes guardar. ¿Estás en casa?”.
Posteriormente y tras entablar una conversación entre supuesto hijo y víctima, el autor de los hechos comenta que está teniendo una serie de problemas con su teléfono, por lo que le habla desde este, prestado por un amigo.
Los autores argumentan, para no realizar llamada o mensaje de voz que los puedan delatar, que tiene el teléfono estropeado y que tiene que enviarle mensajes desde ese número de teléfono, pero que espera que le arreglen el suyo en unos días.
Tras una breve conversación, el supuesto hijo/a le dice a la víctima si le puede hacer un pequeño favor, ya que tiene que realizar urgentemente unas transferencias bancarias.
El motivo para que se haga estas transferencias suele variar y va, desde la supuesta compra de un ordenador, pagos pendientes y argumentos genéricos que no le delaten ante cualquier dato que pueda alertar a la supuesta víctima. Así, por ejemplo, no se arriesgan a decir que tienen que pagar el alquiler de su vivienda, porque realmente carecen de datos del verdadero hijo y es posible que este no viva de alquiler, de ahí que utilicen excusas genéricas.
Ante la insistencia del interlocutor y al manifestar que el teléfono no les funciona, las victimas no comprueban la llamada, dirigiéndose a su entidad bancaria o accediendo a su banca online para realizar la transferencia, convencidas de que se las está realizando a sus hijos.
Este tipo de transferencias suelen ser de la modalidad inmediata, lo que hace que no se pueda retrotraer cuando se dan cuenta de los hechos, realizando los autores la disposición del dinero de forma inmediata.
Ante la proliferación de este tipo de delitos, la Policía Nacional recomienda prudencia y precaución, y difunde una serie de consejos.
- Hay que mantener la calma en todo momento, asegurarse de la fiabilidad y veracidad del mensaje antes de acceder a ningún enlace y nunca facilitar datos personales, bancarios o realizar pagos a desconocidos.
- Sospechar siempre de mensajes de whatsapp que se hagan pasar por un familiar desde teléfonos que no tenemos la certeza de que son de este familiar no corresponden con los que tenemos en la agenda de nuestro Smartphone.
- Siempre llamar al teléfono que conservamos en la agenda de él para comprobar que es correcto.
- Sospechar de la urgencia en el envío de las transferencias y sobre todo si exige que sean inmediatas, dado que esta fórmula es habitual en los estafadores.
- Tomar precauciones si nos dicen que nos les funciona ni el micrófono ni la cámara, no es más que un motivo para no delatarse si se le pide que mande un audio o una videoconferencia, reconociéndose así que no se trata del familiar.
- Contactar siempre antes de realizar cualquier transferencia, con nuestro familiar y si hay que posponerla hasta el siguiente día porque no se localiza háganlo, si no lo verifica previamente después será tarde ya que al tratarse de transferencias inmediatas a los pocos minutos de recibirla el estafador, serán retiradas de la cuenta destino.