Organismos y Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado han participado en la elaboración del plan, diseñado por el Centro de Inteligencia contra el Terrorismo y el Crimen Organizado, que será el encargado de coordinar su ejecución.
El plan pivota en torno a un objetivo estratégico principal, reducir el nivel de amenaza asociada al cultivo y tráfico de marihuana, mediante medidas articuladas en torno a tres objetivos específicos: incrementar la detección y desarticulación de grupos de crimen organizado dedicados a estas actividades delictivas; disminuir los canales de distribución de la marihuana; y favorecer la destrucción de las plantaciones.
El Ministerio del Interior pone en marcha un Plan Nacional de Actuación contra la Criminalidad Asociada a la Producción y Tráfico de Marihuana cuyo objetivo es impulsar una respuesta conjunta de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, potenciar la coordinación y cooperación entre ellas y aumentar su eficacia en el conjunto del territorio nacional para reducir el nivel de amenaza que representa el cultivo y tráfico ilegal de la planta del cannabis y sus productos derivados.
El impulso definitivo a dicho plan de actuación se ha producido este martes en una reunión presidida por el ministro Fernando Grande-Marlaska, que ha estado acompañado por el secretario de Estado de Seguridad, Rafael Pérez; el director general de Coordinación y Estudios, José Antonio Rodríguez, y el director del Centro de Inteligencia contra el Terrorismo y el Crimen Organizado (CITCO), Manuel Navarrete.
A la reunión también han asistido el comisario general de Policía Judicial de Policía Nacional, el general jefe de Policía Judicial de la Guardia Civil, el subjefe de la división de Investigación Criminal de los Mossos d’Esquadra, el comisario de Cooperación Exterior de la Ertzaintza y el jefe del área de Investigación Criminal de la Policía Foral de Navarra, así como el subdirector general de Operaciones de la Dirección Adjunta de Vigilancia Aduanera y el fiscal especial Antidroga.
Todos estos Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado, así como Vigilancia Aduanera y la Fiscalía, han participado en la elaboración del plan de actuación bajo la coordinación del CITCO, cuyos expertos se han encargado del diseño definitivo del mismo.
La Estrategia Nacional contra el Crimen Organizado y la Delincuencia Grave 2019-2023, aprobada por el Consejo de Seguridad Nacional el 21 de febrero de 2019, hace mención específica a la progresión que en estos últimos años ha sufrido el cultivo y tráfico de marihuana en España, y ese es el marco de referencia para el desarrollo de este plan operativo de actuación en la materia.
Amenaza creciente
En los últimos años, las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado ha detectado un notable incremento del cultivo y tráfico de marihuana en España. El cultivo de la planta de cannabis se realiza ya tanto en pequeños espacios cerrados, como en grandes plantaciones en exteriores.
Las incautaciones llevadas a cabo en los últimos años en España muestran el enorme crecimiento experimentado tanto en el número de plantas como en el de kilogramos de marihuana aprehendidos. Desde 2015, las incautaciones de marihuana y plantas de cannabis en España han experimentado incrementos de entre un 150 y un 305 por ciento, sobre todo a partir de 2019.
Este crecimiento muestra que España se ha convertido en país productor de marihuana y derivados del cannabis, que es ya una de las principales actividades criminales por detrás del tráfico de hachís y de cocaína.
En el cultivo de cannabis y el tráfico de marihuana operan ya verdaderas organizaciones trasnacionales con una potente actividad policriminal y provistas de gran logística y movilidad.
Su actuación está generando un aumento de la violencia intra-criminal y hacia las Fuerzas de Seguridad, así como la aparición de ilícitos asociados como la trata o el favorecimiento de la inmigración irregular para la explotación laboral de las víctimas en las plantaciones de cultivo, donde son sometidas a condiciones de trabajo inhumanas.
El CITCO considera que la amenaza que representa este fenómeno delictivo se encuentra en unos parámetros de valoración altos, y ha requerido ya el desarrollo de otros planes estratégicos, como Plan Especial de Seguridad en el Campo de Gibraltar, que está demostrando su eficacia.
Respuesta conjunta
Con la finalidad de reducir el nivel de amenaza asociado a esta actividad delictiva, el Plan Nacional de Actuación contra la Criminalidad Asociada a la Producción y Tráfico de Marihuana pretende impulsar una respuesta conjunta de todas las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, potenciando la coordinación y cooperación entre ellas, así como de la Fiscalía Antidroga y la Dirección Adjunta de Vigilancia Aduanera.
El plan pivota en torno a un objetivo estratégico principal, reducir el nivel de amenaza asociada al cultivo y tráfico de marihuana, mediante el diseño de diez medidas articuladas en torno a tres objetivos específicos: incrementar la detección y desarticulación de grupos de crimen organizado dedicados a estas actividades delictivas; disminuir los canales de distribución de la marihuana, y favorecer la destrucción de las plantaciones así como la inutilización y/o destrucción de los medios empleados para el cultivo.
La vigencia del plan será de un año, sin perjuicio de revisión en caso necesario, y será coordinado desde el CITCO.