El Black Friday está a la vuelta de la esquina y el Banco de España hace una serie de recomendaciones
Recuerda que para los ciberdelincuentes es una oportunidad perfecta para hacerse con tu información bancaria ya que, movidos por las prisas de las suculentas ofertas de tiempo limitado, los compradores prestamos menos atención a las páginas webs visitadas.
¿Qué entendemos por la suplantación de personalidad en la contratación de servicios bancarios? Los ciberdelicuentes intentan hacerse con información personal por distintas vías (correos electrónicos, sitios web, SMS, etc.) que aparentan ser legítimas. En estas fechas es corriente que envíen un correo al comprador para que valide o confirme una supuesta compra. Una vez tienen tus datos en su poder podrán emplearlos para contratar productos bancarios en tu nombre o robar dinero directamente de tus cuentas y tarjetas.
¿Cómo puedes prevenirlo?
Fíjate muy bien en la dirección web (url) de las páginas a las que accedas, que deberán comenzar siempre por «https», sobre todo si vas a introducir datos de tu tarjeta o medio de pago. Es positivo que la página cuente con sellos de confianza para el comercio electrónico. Si la página no te es conocida, es útil buscar opiniones en foros de internet o redes sociales. Otra opción es realizar los pagos por Internet con tarjetas prepago, en las que se debe recargar el saldo previamente, o tarjetas virtuales, creadas exclusivamente para operaciones no presenciales.
Cuidado con los correos electrónicos recibidos. Desconfía de aquellos cuyo contenido persiga asustarte y te insta a que proporciones información personal, como nombres de usuario y contraseña. Revisa su ortografía y redacción, ya que muchas veces contendrán errores de traducción y frases mal construidas. Suelen ir encabezados con fórmulas genéricas como «Estimado cliente» o similar, y es probable que te pidan que hagas algo urgentemente con el pretexto de que tu cuenta será cancelada o limitada. Generalmente incluyen un enlace que, en vez de llevarte a la web oficial, te lleva a otra que estéticamente es muy parecida. Por último, comprueba la dirección de correo electrónico del remitente, ya que no se suele corresponder con quién dice ser.
Si has conseguido detectarlo, no proporciones información ni accedas a los enlaces ni descargues cualquier dato adjunto. En caso de duda, puedes remitir el correo a la empresa o servicio que supuestamente aparezca representado.
Si, por desgracia, has picado el anzuelo, comunica a tu entidad lo sucedido para que bloquee la operación y revierta, en la medida de lo posible, el problema. A continuación, cambia las contraseñas de todos los servicios que utilices habitualmente, como tu correo electrónico, pero recuerda usar contraseñas distintas en cada uno. Es aconsejable, además, presentar denuncia ante la policía.
Existen muchas otras técnicas que puedes usar para prevenir la ciberdelincuencia. No te confíes, infórmate y usa el sentido común para no caer en ningún fraude cuando hagas tus compras por Internet.