Miguel Gómez, presidente de JUSAPOL, se mostró en el día de ayer rotundo en su discurso frente al Ministerio del Interior:
“La lucha sigue, hemos parado por la pandemia, pero seguimos adelante, no nos hemos quedado atrás. La unión de policías y guardia civiles nos hace ser fuertes en nuestra lucha por la equiparación real. Este ministerio ha dado carpetazo a la equiparación, pero miente, no dice la verdad. No ha visto jamás una nómina de un policía, tenemos entre un 15% y un 20% menos que los Mossos…”
De vuelta, muy entrada la tarde, en el autobús hacia su casa, recibió la llamada de h50, tenía la voz tomada del cansancio.
“Estoy agotado … pero ha sido un día muy bonito, volvemos a las calles. Estoy feliz, aunque hoy no puedo más, ha sido un día muy largo y cansado, pero muy bonito.
Hemos estado miles de policías y guardias civiles con sus familias otra vez en la calle, reclamando nuestros derechos… ¿sabes una cosa?, luego hemos ido al Retiro a comer juntos, sentados en la hierba y eso era JUSAPOL. Unión, fuerza, lucha… compañerismo. El espíritu sigue vivo…”, manifestó.
Este digital consultó también con otro dirigente de JUSAPOL para solicitar datos y escribir este artículo aunque no lo dijo, estamos seguros que no desea ser citado, es humilde y reservado.
No escribiremos los datos, los miles de policías y guardias civiles que asistieron, ni siquiera las reivindicaciones que conocen todos, solo dejaremos una frase que nos impactó de la conversación:
“A estas horas ya estoy fundido … se lo debo a mi padre, es un policía jubilado y él me da fuerza.”
Ruego perdones nuestro atrevimiento.
Autor: Gedeón Pérez.