El pasado 7 de agosto en la prisión Campos del Rio y según denuncia en un comunicado la asociación Tu Abandono Me Puede Matar, sobre la una y media de esta madrugada, uno de los internos en primer grado que alberga dicho centro, en su Departamento de Aislamiento, “M. A.”, cuya peligrosidad es notoriamente conocida en la multitud de centros penitenciarios por los que ha pasado y donde ha sido protagonista de hechos regimentales muy graves, solicita que le den más medicación amenazando con prender fuego a la celda si no le dan lo que pide.
Dicho interno ya había recibido la medicación que tenía prescrita, con lo que la coacción sólo tiene como objetivo, amparándose en estar en un estado de nerviosismo, obtener medicación extra por dicha vía.
Los funcionarios acuden hasta la galería donde se encuentra su celda, para verificar dicha amenaza, percibiendo según se acercan como les llega oler a quemado, que aumenta al acercarse a dicha celda. Ante el riesgo que implica, por el humo que se genera de la combustión de los colchones ignífugos y sus enseres, que pone en serio peligro la vida del resto de internos de su galería, se informa al Jefe de Servicios, a fin de neutralizar dicho fuego y en caso de ser necesario, que éste ordena la evacuación.
Personado el Jefe de Servicios, ordena la apertura de la celda, y se puede apreciar como el interno ha prendido fuego a varios papeles para así lograr que se propague al resto de elementos combustibles de la celda, por lo que ordena emplear la manguera de incendios y así sofocar el fuego. El citado interno que está clasificado en art. 91.3, que es el primer grado destinado a los internos más peligrosos e inadaptados, ya no sólo al régimen ordinario, sino también al régimen en primer grado, se encuentra visiblemente alterado, por lo que ante dicha agresividad a instancia del Jefe de Servicios se tienen que vestir los funcionarios los trajes de intervención para evacuarlo.
Siguiendo el protocolo, se busca convencerle para que deponga su actitud y que éste permita su evacuación a otra de las celdas de la misma galería. Lejos de mostrarse colaborador, no obedece ninguna orden, y en el momento de realizar la apertura de la puerta de su celda, se abalanza hacia los funcionarios con la clara intención de agredirles, empleando para ello un trozo de plástico afilado contra los trabajadores. Los funcionarios tienen que reaccionar como pueden, empleando las defensas de goma y los escudos como protección, para vencer su resistencia y proceder a sujetarle por medio de esposas. El interno se resiste fuertemente a ser esposado, y una vez logrado, viendo el estado agresivo que presenta, y ante el evidente riesgo de que realice cualquier acto auto-lítico, ordena que se aplique sujeción mecánica para que se le inmovilice por medio de las correas reglamentarias para dicho fin.
A consecuencia de esta intervención, uno de los funcionarios resulto herido en un brazo con un importante corte que precisó cinco grapas de sutura, y no ha sido más dada la alta profesionalidad mostrada por los funcionarios y el Jefe de Servicios que intervino, y lo limpia y rápida que fue su actuación.
La asociación Tu Abandono Me Puede Matar denuncia las condiciones laborales de los funcionarios de prisiones, falta de medios personales y humanos. Del mismo modo, en el comunicado concreta que “no es de recibo ver cómo se miente descaradamente a la ciudadanía diciendo, qué en estos dos años de gobierno, con promociones anuales de 900 plazas se está solucionando el déficit de 3.500 trabajadores con los que se encontraron al llegar, omitiendo deliberadamente que cada uno de esos dos años, entre jubilaciones, excedencias y fallecimientos, nos han abandonado anualmente alrededor de unos 1.100 trabajadores. Así a lo que llegamos es a carecer ya de cerca de unos 4.000 trabajadores, lo que es insostenible”.
