El 8 de noviembre de 1849, una vez finalizada la segunda guerra carlista, el trono de España lo ocupaba Isabel II y el presidente del consejo de Ministros era D. Ramón María Narváez Campos, Duque de Valencia. Ese año fue crucial para lo que hoy conocemos como seguridad privada.
Debido a la Real Orden del Ministerio de Comercio, Instrucción y Obras Públicas, se creó el primer reglamento por el cual se crean los guardas de campo jurados, en contraposición de los antiguos guardas particulares, figura creada en tiempos de Carlos I de España los cuales debían ser “hombres de buen criterio y prestigio”.
172 años nos separan de nuestros antecesores, 172 años de historia del sector de la seguridad privada. Han cambiado gobiernos, han pasado guerras, la sociedad a evolucionado, pero la seguridad privada siempre a estado hombro con hombro con la sociedad española, sus gobiernos, sus fuerzas de orden público. Han sido partícipes de momentos históricos de nuestro país, en lo bueno y en las peores circunstancias.
En muchas ocasiones primeros intervinientes: los vigilantes de seguridad protegiendo miles de infraestructuras como el transporte público o edificios públicos, los guardas rurales protegiendo la diversa flora y fauna de nuestro país, los vigilantes de explosivos cuyo esfuerzo garantizan que fiestas como las fallas se lleven a cabo, los detectives privados investigando casos y colaborando con la justicia, los jefes y directores de seguridad cuyos desvelos proporcionan aún más seguridad en todos los servicios y los escoltas protegiendo a las personas amenazadas por otros seres que no piensan igual que ellos.
En muchas ocasiones colaboradores necesarios de las fuerzas de orden público, en otros casos marginados por la propia sociedad que protegen, olvidados en miles de situaciones por sus mandatarios. Pero a pesar de ello, todos los días se podrán su uniforme de trabajo, y seguirán haciendo su labor. La de proteger personas, bienes e inmuebles, indefensos ante las agresiones, indefensos ante empresas que incumplen sistemáticamente un convenio colectivo que cada vez que se firma va a la baja en contra del sector.
A pesar de todo ello, el sector siempre seguirá en pie suceda lo que suceda porque son personas, son SEGURIDAD PRIVADA.
Desde la Asociación Marea Negra por la Seguridad Privada, directiva, coordinaciones y socios transmiten su felicitación a todos los compañeros del sector en su día, el día nacional de Seguridad Privada.