En España se denunciaron 1305 agresiones sexuales con penetración durante los meses de enero y septiembre, es decir, una violación cada 5 horas. Así lo confirman los datos ofrecidos por el Ministerio de Interior en el reciente Balance de criminalidad.
Estos datos evidencian un alarmante incremento respecto a los ya preocupantes números registrados con anterioridad que situaba la media de una mujer violada cada ocho horas. Durante los nueve primeros meses de 2018 la tasa delictiva aumenta un 23% más respecto al mismo periodo en el año anterior.
Las agresiones sexuales “menores” donde no ha habido penetración, como tocamientos sin consentimiento también han experimentado una tendencia al alza similar. Durante el mismo intervalo, se registraron 9.140 denuncias, frente a las 7.911 del año anterior.
Pese al número registrado de delitos sexuales, España continúa a la cola de denuncias por violación ante el temor de no ser creídas. Diversas asociaciones consideran el miedo y la carencia de políticas públicas comunes son factores determinantes que influyen directamente en la evasión de las víctimas para poner en conocimientos de las autoridades estos tipos delictivos.