Según comunica la asociación Tu Abandono Me Puede Matar: “el día 28 de enero, se pusieron 30 vacunas de la primera dosis del Covid al personal sanitario del centro.
Dentro de dicho contingente de vacunación, se llegaron a vacunar las siguientes personas; el subdirector médico, 4 médicos (un quinto médico no pudo hacerlo por estar contagiado de COVID en su domicilio) ,ats (enfermeros) , auxiliares de enfermería un radiólogo y el dentista.
Estos 2 últimos (radiólogo y dentista) son personal externo contratado que viene de forma puntual a realizar su trabajo. Se podría poner en duda si pertenecen o no al grupo que debe ser vacunado en estos momentos como de primera línea.
Ahora bien, lo más llamativo y escandaloso fue la vacunación a 5 psicólogos (otro no fue vacunado x encontrarse de baja embarazada) del centro, personal no sanitario, con contacto muy puntual con los internos. De ninguna manera se puede considerar a este colectivo como de primera línea, según los criterios de vacunación.
Hay que considerar, que ni a los internos ni a los funcionarios del área de vigilancia que se encuentran las 24 horas del día en contacto con los internos, se les vacuno de forma alguna.
En estos momentos, en que hay que ser especialmente escrupuloso con el limitado y valioso recurso de la vacuna, que se hayan vacunado colectivos que no les corresponde, saltándose de manera evidente el criterio marcado por las autoridades sanitarias, es del todo modo inaceptable y crea una sensación de clientelismo, muy lejos de la labor de servicio público que se le supone a los funcionarios de prisiones, como servicio esencial.”
La asociación Tu Abandono Me Puede Matar denuncia estos hechos y pone en conocimiento la situación que se vive en las cárceles españolas por falta de medios y desatención hacia los funcionarios de prisiones.