Los CDR se han lanzado a la calle lanzando cabezas de cerdo a los Mossos, quemando contenedores y montando barricadas con el mobiliario urbano
La Sala Penal del Tribunal Supremo confirmó la inhabilitación del presidente Quim Torra durante un año y medio
La negativa a retirar los lazos amarillos de los edificios públicos de la Generalitat en periodo electoral ha sido el motivo por el cual el Tribunal Supremo ha decidido por unanimidad confirmar la decisión del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña.
En dicha sentencia se le condenaba a un año y medio de inhabilitación para cargo público, por lo que el vicepresidente Pere Aragonés de ERC asumirá las funciones de Quim Torra.
Los Mossos d´Esquadra ya estaban alerta por los posibles incidentes que los Comités de Defensa de la República (CDR) pudieran protagonizar, al igual que ocurrió en octubre del año pasado.
Suspensión de permisos
Los Mossos han visto suspendidos sus permisos, en concreto los que componen sus unidades de antidisturbios ante la más que previsible reacción violenta de los separatistas por la inhabilitación del presidente Quim Torra.
Quim Torra estuvo acompañado de su mujer en la plaza de San Jaime, donde se congregaron cientos de personas, convocados por ANC y Òmnium Cultural para protestar por la decisión del Tribunal Supremo.
Una parte de los asistentes se desplazó hasta la Jefatura de la Policía Nacional, donde los Mossos habían desplegado un dispositivo de seguridad. Una vez allí comenzaron a gritar e insultar a los agentes, a los jueces y al Rey, así como a vociferar frases contra España.
Cerca de medio millar de CDR se desplazaron hasta la Delegación del Gobierno, otro punto protegido por los Mossos ante la previsión de incidentes.
Una vez allí, los radicales comenzaron a arrojar cabezas de cerdos contra los policías autonómicos, así como a montar barricadas con contenedores y maceteros.
Otro de los grupos de los CDR se dirigió hacia el parlamento catalán, donde tras toparse con la presencia de los Mossos, comenzaron a lanzarles piedras y otros objetos contundentes, quemando a su paso contenedores de basura.