Dos tuiteros han sido condenados por injurias a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad con una multa de 4.320 euros.
La Audiencia Provincial de Teruel descarta el delito de odio, pero si considera que hubo injurias hacia las FFCCS. Buscaban el “descrédito o desprestigio” de la Guardia Civil.
Los hechos se remontan al 14 de diciembre de 2017, cuando “Igor el Ruso” asesinó a dos guardias civiles, Víctor Romero y Víctor Jesús Caballero.
En un primer lugar el Juzgado de lo Penal de Teruel absolvió a cuatro tuiteros, entre los que se encontraban los dos condenados.
Cada uno de los condenados tendrá que pagar 4.320 euros al considerar que los comentarios iban enfocados para ocasionar “un descrédito sin fundamento hacia los miembros de la Guardia Civil que pueden llegar a dañar la confianza de todos en esta institución a la que injuriaron y ofendieron, y más teniendo en cuenta el contexto en que se vertieron”.
Uno de los condenados llegó a escribir en la red social Twiter tras conocerse el asesinato de los agentes: “Pues que hubieran estudiado en vez de alistarse en un cuerpo militar de matón y ablandaabuelas”. Otro de los condenados escribió en Facebook “Me cago en la memoria de estos perros bastardos” y otras expresiones del estilo.
Según la Sala de la Audiencia Provincial, entre los límites a la libertad de expresión, está el “necesario respeto a la honorabilidad y reputación de la Institución de la Guardia Civil, evitando que éstas queden a merced, sin límite, de cualesquiera ultrajes de quien actúa en el escenario público”.
El tribunal no ha establecido una indemnización a favor de las familias de los guardias civiles asesinados, “pues no son los sujetos pasivos del delito por el que son condenados los acusados, siéndolo el prestigio de las instituciones, en este caso el Instituto Armado”.
