El Gobierno y las comunidades autónomas han consensuado este lunes ampliar el uso de las mascarillas a todos los espacios donde no se puede garantizar la distancia de seguridad de dos metros.
Serán abligatorias en el transporte público, si bien a partir de ahora, cómo indica el Ministerio de Sanidad en un comunicado, lo serán también en espacios cerrados y en la vía pública “si no es posible garantizar la distancia mínima de seguridad de dos metros”.
Su uso quedará regulado en una orden ministerial que será publicada en los próximos días.
Es una de las decisiones que ha adelantado tras la conferencia de presidentes que se realiza cada domingo. La otra ha sido un paquete de medidas en la España rural. “Las de los núcleos de menos de 5.000 habitantes van a ser extendidas a aquellos a menos de 10.000”, ha dicho Illa.
A falta también de más concreción sobre estos supuestos, el más inminente implica eliminar los horarios para hacer actividad física en estos territorios, algo que sucederá independientemente de la fase en la que se encuentren.