Los timos suelen ser ilícitos penales bastante comunes en nuestra sociedad. Los malhechores agudizan su ingenio para embaucar a la víctima a través del engaño y el despiste como herramientas estratégicas y la confianza e inocencia como cobertura de sus viles maniobras.
En nuestra vida diaria realizamos multitud de pagos en efectivo de los cuales en rara ocasión nos detenemos a comprobar el cambio. Quizás todavía menos, nos detenernos para cotejar las características de cada moneda al objeto de fijarnos en las características que presumen su autenticidad.
El gran parecido entre monedas de diferentes países y la diferencia notable en el valor al cambio entre ellas, abre la posibilidad de timos relacionados con el cambio monetario. Concretamente en nuestro país, se introducen con frecuencia monedas extranjeras similares a la moneda de dos euros.
¿Sabrías diferenciar a primera vista una moneda de dos euros de la de otros países?
Los cinco dírhams marroquíes tienen gran similitud con nuestra moneda europea. Su valor ronda los 0.46 euros al cambio por lo que caer en esta trampa supone perder 1.50 euros aproximadamente.
Los cinco rands sudafricanos son otro ejemplo más de este tipo de estafa con un valor al cambio equivale a 0.30 euros.
En este caso observamos una moneda de 10 baths tailandeses con un valor al cambio de 0.26 euros.
El valor de alguna de estas monedas puede descender hasta un valor de 0.02 euros como es el caso de un peso argentino.
Conviene revisar bien las monedas cuando te devuelven el cambio para no caer en este tipo de estafas y de hacerlo, quitar esta moneda de circulación.
